Aún con muchas dudas, pero los avances en el proceso de vacunación y el anuncio de la puesta en marcha del ‘pasaporte covid’ comienzan a reavivar el interés por viajar de los extremeños. Condicionadas durante más de un año por las cancelaciones de reservas, los posteriores reembolsos, y el desplome de la cifra de clientes, las agencias de viajes han sido uno de los sectores más golpeados económicamente por la pandemia. La relajación de las restricciones a la movilidad abre para ellas ahora un nuevo escenario. En la región hay alrededor de dos centenares de estos negocios, de los que 38 están integrados en la Asociación Europea de Agencias de Viajes de Extremadura (Aedavex).

Los progresos en la campaña de vacunación y el anunció del ‘pasaporte covid’, ¿se están reflejando ya en una mayor actividad de las agencias de viajes extremeñas?

La situación es ya más esperanzadora. La evolución de la vacuna, el levantamiento de las restricciones a los desplazamientos y sobre todo el anunció del ‘pasaporte covid’ hacen que el cliente se esté animando más a viajar. De momento, la gente continúa queriendo mucha flexibilidad en las reservas por las incógnitas que siguen planteándose para el futuro. Veremos una vez que se estabilice el uso del pasaporte y si hay también acuerdos bilaterales con otros países que no están incluidos en este certificado, como es el caso de Reino Unido. Estamos todavía con muchos condicionantes en el horizonte, pero ya suenan los teléfonos, hay intención de reservar. El cliente está entrando en las agencias y pregunta, los compañeros notan más actividad aunque todavía queda camino por recorrer. Se ha despertado el interés y el sector empieza a tener un cierto repunte en el deseo de hacer reservas pese a que se han materializado pocas. 

¿Y cuáles son los destinos que están despertando más ese interés?

Los destinos que se están vendiendo más son las costas y las islas españolas, sobre todo Canarias, y también está habiendo peticiones para el Caribe. Hay ganas de salir fuera. El año pasado lo que hubo fue un ‘boom’ de alojamientos rurales en destinos de interior y se recurrió a las agencias para este producto, incluso para destinos muy cercanos, porque había mucho temor y desconocimiento. Este año se está recurriendo a las agencias para viajar a la playa, la gente tiene muchas ganas de ir a ella después que en 2020 la mayor parte no pudiera hacerlo. 

¿Y los viajes de novios?

También está habiendo más peticiones. La flexibilización en la celebración de eventos es algo que repercute directamente. Sí está habiendo un aumento, pero tímido todavía. Las parejas entran sobre todo a preguntar posibles fechas para hacer su viaje de luna de miel.

«Estamos todavía con muchos condicionantes en el horizonte, pero ya suenan los teléfonos, hay intención de reservar»

¿Cree que esta sensación de incertidumbre que aún permanece puede hacer que el viajero recurra a partir de ahora más que antes de la pandemia a las agencias en busca de asesoramiento y confianza, en lugar de diseñar y gestionar los desplazamientos por su cuenta?

Sin duda. Ahora mismo el cliente que va a viajar quiere tener muchísima seguridad. Quizás, si ya tiene un destino definido y sabe lo que quiere, antes se informa del producto en internet pero al final se está viendo que recurre a la agencia porque necesita una información y un asesoramiento que a lo mejor no encuentra ‘on line’ y que para él es más seguro obtenerlos de un agencia de viajes. Además, no hay que olvidar que el año pasado hubo numerosas cancelaciones al declararse el estado de alarma de clientes que habían hecho sus reservas ‘on line’ y les ha sido muy complicado obtener sus reembolsos, mientras que con las agencias ha sido todo mucho más fácil, porque fuimos las que dimos la cara y se hizo frente a los desembolsos que suponían las cancelaciones. Ese es otro factor que ahora la gente considera mucho.

«Los destinos que más se están vendiendo son las costas e islas españolas, sobre todo Canarias, y hay peticiones para el Caribe»

En principio, en unas semanas acabará la validez de los bonos de viaje, la medida que puso en marcha el Gobierno y que permitía a los viajeros aplazar las reservas realizadas, ¿eso afectaría a muchas agencias en la región?

Se está tratando de que el Gobierno amplíe ese periodo porque a día de hoy todavía hay navieras y compañías aéreas que deben dinero a las agencias de viajes. Aquí también es una cuestión que nos afecta, sobre todo a algunos compañeros de Badajoz que tenían grupos en cruceros o para viajes al Caribe, por lo que les podría causar una pérdida importante. 

¿Se han quedado muchas agencias por el camino durante este último año en la región?

Todavía no tenemos los datos totales, pero entre un 12% y un 15% de agencias han tenido que cerrar.