Hace más de dos décadas que comenzó a plantearse unir Extremadura y Ciudad Real por autovía, lo que supondría convertir la actual Nacional 430 en la A-43 (que ya une Ciudad Real con el Levante). Desde entonces se han hecho propuestas, estudios y algún proceso de información pública, sin más avances. Pero ahora, una resolución firmada en julio por el director general de Carreteras del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Javier Herrero, y publicada este martes, podría deshacer por completo la idea de construir una nueva autovía en suelo extremeño. 

La resolución modifica el estudio informativo en marcha y pone sobre la mesa mejorar el trazado actual con distintas actuaciones entre Santa Amalia y Ciudad Real, aparcando así el proyecto de autovía «debido a la necesidad de actuar a corto plazo en la modernización y mejora funcional de la N-430 y la incertidumbre existente en relación al futuro trazado de la autovía A-43 entre Mérida y Ciudad Real, dados los antecedentes».

Este documento, publicado en la Plataforma de Contratación del Estado, viene a proponer un plan alternativo a la conversión en autovía, entre otras cosas, aduce, porque el trazado no supera los 5.000 vehículos al día y tiene dificultades ambientales. Ni la opción norte de la A-43 (que implicaría el desdoblamiento de la N-430) ni la sur, que plantea el trazado por Almadén y Puertollano, suponen las «alternativas más eficientes». 

En concreto, la alternativa que propone es la realización de «una actuación generalizada de modernización» de la actual N-430, con actuaciones de mejora de la plataforma a lo largo de 210 kilómetros, acondicionamiento de trazado y variantes que supriman las travesías de poblaciones. 

Tres carriles

También, «a la vista del estudio de tráfico y de accidentalidad, se analizaría la viabilidad de diseñar determinados tramos como carretera 2+1, o la implantación de carriles aislados de adelantamiento, de manera que se vean mejoradas las condiciones de seguridad vial y el nivel de servicio de la carretera», señala la resolución. El documento precisa que tras las mejoras, los vehículos circularían por esta vía a 100 kilómetros por hora, «pudiendo disminuirse justificadamente en tramos medioambientalmente sensibles o de relieve accidentado». También se contempla que las conexiones con otras carreteras se realicen «preferentemente» mediante enlaces.

Con estas propuestas, el ministerio da la orden para realizar un nuevo estudio informativo, cuya redacción conllevará 30 meses de trabajo. Posteriormente, habrá un trámite de audiencia pública, así como a un procedimiento de evaluación de impacto ambiental. El conjunto de las actuaciones ahora propuestas tendrá un presupuesto de licitación estimado de 350.000.000 millones.