La última sentencia que insiste en el derribo total del complejo Isla de Valdecañas ha abierto el debate sobre la protección de espacios naturales en Extremadura. «Las limitaciones que tenemos hacen difícil luchar contra la despoblación», señaló el presidente de la Junta la pasada semana. Y ya se ha puesto manos a la obra para intentar cambiarlo. En un primer borrador, la Junta quiere modificar los límites de 17 zonas incluidas en la Red Natura 2000. ¿A qué razones obedece? ¿Es fácil llevar a cabo estas modificaciones? ¿Qué supone la protección en Extremadura? Dos expertos extremeños en medioambiente y en ordenación del territorio desgranan las claves sobre esta red europea y sus limitaciones y evidencian las dos posturas contrarias que tiene este debate.  

1 - ¿Qué es la Red Natura 2000? ¿Es obligatoria?

Natura 2000 es una red ecológica europea de áreas de conservación de la biodiversidad que se puso en marcha a principios de los años 90. Consta de Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA), designadas en virtud de la directiva aves, y Zonas Especiales de Conservación (ZEC), establecidas de acuerdo con la directiva hábitat, que también son llamadas Lugares de Importancia Comunitaria (LIC). Su finalidad es asegurar la supervivencia a largo plazo de las especies y los tipos de hábitat en Europa, contribuyendo a detener la pérdida de biodiversidad. Es el principal instrumento para la conservación de la naturaleza en la Unión Europea y es también una obligación. «Cuando España entró en la UE dispuso de un montón de fondos para sus agricultores, para sus pueblos, sus infraestructuras, pero también tenía una serie de obligaciones y una de ellas era diseñar una red de espacio para conservar la biodiversidad», explica Marcelino Cardalliaguet, delegado de SEO/BirdLife en Extremadura. 

Al principios de los años 90, la comunidad determinó apenas cuatro zonas protegidas y a inicios del 2000 la Comisión Europea llevó al Estado español a un proceso de infracción por «insuficiente declaración de espacios naturales Red Natura 2000». Y Extremadura estaba entre las comunidades con menos zonas declaradas. «Entonces la región hizo los deberes y para 2006 ya tenía la red que tenemos ahora. Europa determinó que era suficiente y adecuada y Extremadura salió del proceso de infracción», añade. 

2 - ¿Qué extensión ocupa esta red en Extremadura?

Extremadura tiene un 30,6% de espacios protegidos y prácticamente todos (el 30,3%) están incluidos en la Red Natura 2000. La región cuenta con 71 ZEPA y 89 ZEC (algunas compartidas) y además de estas, hay otras zonas protegidas con otras figuras de protección autonómicas. Son árboles singulares, monumentos naturales... Y aparte de la protección medioambiental de espacios, cada localidad en sus planes de ordenación urbana establecen determinados usos del suelo que tienen que protegerse contra el urbanismo y se catalogan como suelos no urbanizables. 

Dentro del país, Extremadura tiene un porcentaje de zonas Red Natura inferior a otras autonomías. «Cataluña, por ejemplo, tiene un 37% del territorio protegido, Baleares el 35%, Valencia el 39% y Madrid, que urbaniza bastante, tiene más de un 41% de su terreno dentro de la Red Natura», añade Cardalliaguet. Y pueden designarse, perfectamente, espacios que han sido alterados por la mano del hombre como embalses o cultivos. «Donde haya biodiversidad, especies silvestres, de interés, amenazadas o que sean escasas pueden designarse independientemente si es un cultivo o un embalse», añade.

Por contra, el catedrático de Ordenación del Territorio de laUniversidad de Extremadura (UEx) Julián Mora Aliseda considera que un espacio que no sea natural en origen no debería incluirse en esta red europea. De hecho, plantea otra forma de comparar la extensión de las zonas protegidas entre las regiones, no por superficie total protegida, sino en función de la población de cada territorio. «Extremadura tiene 1,3 millones de hectáreas protegidas y somos poco más de un millón de habitantes. Eso supone que tenemos 1,12 hectáreas protegidas por habitante frente al 0,006% que tiene País Vasco, por ejemplo», señala. 

Mapa de la Red Natura 2000 en Extremadura. En verde, las zonas ZEPA y ZEC.

Mapa de la Red Natura 2000 en Extremadura. En verde, las zonas ZEPA y ZEC. EL PERIÓDICO

3 - ¿Hay exceso de protección en la comunidad?

«Viendo el porcentaje de Red Natura de cada comunidad que está disponible en el Ministerio de Transición, ni mucho menos es cierto que Extremadura tenga un exceso de protección ni por superficie de territorio, ni por un exceso de normas de protección ambiental, que son las mismas que en cualquier otra región de toda Europa», defiende Cardalliaguet, que califica de «pataleta» el debate surgido ahora. «No entendemos a qué viene y nos preocupa porque en lugar de utilizar el caso Valdecañas como una lección para aprender y diseñar mejor cómo integramos los proyectos en nuestro territorio, estamos cargando contra el medioambiente. Y aquí no hay víctimas. ¿Cómo es posible que proyectos grandes se desarrollen en Madrid o Cataluña sin tener que colisionar con su Red Natura siendo superior sobre el territorio que en Extremadura? ¿Por qué aquí no se hace igual?», se pregunta. «Tenemos un 70% del territorio que no está protegido. Y lo que se está transmitiendo de que los extremeños estamos discriminados por el medio ambiente es un argumento interesado», lamenta. 

Distinta es la respuesta de Mora Aliseda, que opina que sí hay un exceso atendiendo a las hectáreas totales protegidas que tiene cada territorio. «¿Qué otra comunidad aporta lo que nosotros a esta red: 1,3 millones de hectáreas, 722 millones de árboles... Tenemos un exceso de protección que nos está limitando el desarrollo. Y lo vemos con los embalses protegidos, que no son humedales naturales, y que están coartando iniciativas turísticas porque son un elemento de diferenciación que tenemos en Extremadura respecto al resto del territorio», apunta. 

4 - ¿Cómo se decide la inclusión en la red y qué limita?

La Red Natura parte de las propuestas que realiza cada estado miembro de la Unión Europea. Y en España son las comunidades autónomas las que proponen cuáles son sus mejores espacios para proteger la naturaleza amenazada. Son ellas, por tanto, las que a instancias de la Unión Europea determinan qué espacios merecen ser protegidos. Y entrar en la red no supone que no se pueda construir en estas zonas, sino que en cada suelo no urbanizable protegido hay unas condiciones de edificación que hay que cumplir. «En principio todos los suelos de Red Natura son no urbanizables, lo que significa que no se puede urbanizar, es decir, hacer urbanizaciones en él, pero construir algo puntual que no suponga hacer una urbanización sí está permitido en Extremadura y en toda Europa», apunta el delegado de SEO/BirdLife. Así, explica, se puede construir una granja, una gasolinera, una vivienda aislada o una autovía en espacios Red Natura. «Hay mil cosas que se pueden hacer, pero lo que no se puede es construir una urbanización porque eso es destinar el suelo a otra cosa para siempre», aduce. Y esa limitación está en toda Europa. 

«Cualquier proyecto que se quiera asentar en una zona protegida tiene que evaluar alternativas, ese es el primer paso que debe dar cualquier promotor. Hay que evaluar varias opciones y luego elegir la alternativa que menos impacto negativo tenga sobre el medio ambiente, sobre el entorno socioeconómico...», señala Cardalliaguet. Y esto, dice, no creemos que se haya hecho en el proyecto de Isla deValdecañas. «Probablemente si se hubiera hecho y siendo honestos con la norma vigente y con las leyes, el promotor y la administración tendrían que haber reconocido que igual poner la urbanización al lado del pueblo y los embarcaderos en el espacio protegido era la mejor opción y nos hubiéramos ahorrado problemas. Solo se pedía sentido común», opina. 

5 - ¿Qué cambios plantea la Junta? ¿Y por qué?

El marco de acción prioritaria 2021-2027 contiene la propuesta que realiza la Junta de Extremadura para la revisión de la Red Natura actual, que debe ser elevada a Europa. La región plantea la modificación de los límites de 17 espacios protegidos, lo que supone más del 10% del total. El documento no recoge en qué consisten los cambios ni en base a qué se proponen, que deben ser básicamente criterios científicos. 

En concreto, se quieren modificar 11 ZEPA: complejo lagunar Ejido Nuevo (en Navalmoral); charca dehesa boyal Navalmoral; charca la Torre (Trujillo); complejo lagunar Los Arenales (Cáceres); embalse de Aldea del Cano; embalse de Arrocampo (en Almaraz); embalse deMontijo (en Mérida); embalse de Valuengo (Jerez de los Caballeros), Riberos de Almonte (entre Las Villuercas y Cáceres), Llanos deCáceres y Sierra de Fuentes (en Cáceres), Río y pinares del Tiétar. Y además otras seis ZEC: Mina Castillejos (en Zafra); Ribera de Gata y Acebo; Mina Ribera de Acebo; Río Ardila Alto (sur de Badajoz); río Tiétar y Sierra de Gredos y Valle del Jerte. 

También, la Junta plantea la creación de un nuevo lugar de interés comunitario (LIC): complejo lagunar Los Arenales (que ahora es ZEPA). Y tres nuevas propuestas de zonas de especial protección de aves (ZEPA): Cañada del Venero (en Campo Arañuelo), Sierra de Gredos y Guadiana-Alto Zújar. 

Las razones no se explican en dicho documento, pero el presidente de la Junta lanzó públicamente el debate y pidió abrir el diálogo con Europa para realizar una revisión de la red y «poder hacer cosas». Aseguró que hay municipios muy constreñidos, como Cáceres con un 50% de su territorio Red Natura, en los que es difícil asentar nuevos proyectos. 

Según los datos que aporta el profesor Julián Mora un total de 23 municipios extremeños tienen más del 90% de su territorio protegido y 43 (incluidos los anteriores) superan el 70%. «Esto significa que algo está funcionando mal y estamos generando una inseguridad jurídica tremenda», añade el profesor. Y recuerda que desde el departamento de Ciencias del Territorio de la UEx ya hace tiempo que plantearon a la Junta la necesidad de «relimitar» y «reclasificar» las ZEPA de la comunidad. «Es que ahora hay áreas que no tienen los valores que exigen las propias directivas comunitarias. No me opongo a que se conserve todo lo que sea necesario, pero debe cumplir los requisitos científicos para ser preservado y debe pagarse bien». Por eso considera que la propuesta que hace ahora la Junta a Europa, aunque llega tarde, es «muy necesaria, si no en Extremadura solo vamos a tener un territorio encorsetado que va a impedir la llegada y la puesta en marcha de nuevos proyectos tan necesarios».

Sin embargo, para Cardalliaguet el borrador que le presentó la Junta en julio de 2021 no es viable en su totalidad. «Hay zonas relacionadas con núcleos de urbanismo ilegal que nos parecen que no cumplen los criterios, son excesivas en algunos casos, y puede que no sean admitidas por Europa. Además cuando nos mostraron las propuestas de modificación no iban acompañadas de un informe exhaustivo, quedaba trabajo por hacer», advierte.

6 - ¿Es factible lograr la desprotección de espacios?

«Por supuesto, Red Natura no es inamovible. Se puede modificar siempre que los cambios sirvan para cumplir mejor con el objetivo de esta red», explica Cardalliaguet. Hay un proceso establecido y regulado para revisar los espacios, que debe ser iniciado por las comunidades o los Estados miembro. «Y además cada seis años la Comisión Europea le pide un informe a cada Estado miembro del estado de la Red Natura 2000 en su territorio para que se actualice», añade. 

De hecho, si sale adelante esta última propuesta de la Junta no sería la primera modificación de la red que se realiza en Extremadura. Eso sí, «tiene que haber unas causas justificadas para que se admita una propuesta de modificación de los límites por parte de la Comisión Europea». ¿Cuáles son esas causas? «Uno de los motivos fundamentales es que haya habido una pérdida de los valores naturales por los que una zona estaba incluida en Red Natura, es decir, que haya desaparecido de esa zona la biodiversidad por causas naturales, no valen causas no naturales. Y otra causa admitida es que haya habido un error inicial, que puede que los haya habido, pero hay que acreditar que se debe a un error. Si la Comisión Europea establece que efectivamente es un fallo comprobable y no obedece a ninguna otra causa, también lo puede admitir». En todos los casos, las propuestas de modificación deben ir acompañadas de un exhaustivo informe que acredite los motivos. Y eso es lo que queda por conocer en la propuesta de la Junta. 

Organizan una jornada en defensa de Isla Valdecañas

El próximo sábado, 26 de febrero, se va a celebrar en el interior del complejo Marina Isla de Valdecañas una jornada en defensa del ‘resort’ tras la última sentencia del Supremo que obliga a su derribo total. Allí se darán cita los representantes de los ayuntamientos, partidos políticos, distintos colectivos y vecinos de la zona para defender el mantenimiento de la isla. La jornada comenzará a las 11.00 con una ponencia del catedrático de Ordenación del Territorio de laUEx Julián Mora Aliseda que repasará la situación de la ZEPA deValdecañas antes y después de la urbanización. Luego habrá un coloquio y la jornada terminará con la lectura de un manifiesto y una visita guiada por el complejo. La actividad está organizada por el colectivo Pensando Extremadura, que preside Mora Aliseda, y por la Plataforma de la Siberia, la Serena y las Vegas Altas (Asiseva).