ENTREVISTA | Rosa María Redondo Presidenta del Colegio de Psicólogos de Extremadura

«Dentro de un centro educativo también se pueden atender la ansiedad o la autoestima»

«Dentro de un centro se pueden atender la ansiedad o la autoestima».

«Dentro de un centro se pueden atender la ansiedad o la autoestima». / EL PERIÓDICO

El Colegio de Psicólogos de Extremadura ha participado activamente en la creación del primer plan de salud mental que llega a la educación extremeña y su presidenta, Rosa María Redondo, considera que ayudará tanto al alumnado como a los docentes a detectar de forma precoz situaciones que alteren el bienestar, a prevenirlas y a atenderlas de una forma más correcta. 

¿Qué aportará este plan?

Es un proyecto que pone el foco en la prevención. El objetivo principal es dotar de herramientas, habilidades y estrategias que sean útiles para favorecer un estado de bienestar psicológico y tengan una influencia positiva en su salud mental del alumnado. También contempla el apoyo al cuerpo docente a la hora de detectar de forma precoz cualquier situación que suponga una alteración del bienestar psicológico de sus alumnos y la coordinación con otros servicios o con unidades de salud mental si fuera precisa una derivación. Es muy importante la atención de los problemas psicológicos que puedan detectarse, pero sobre todo es un proyecto centrado en prevenir que esos problemas aparezcan o se agraven por no recibir una atención adecuada.

¿Qué papel juegan los psicólogos dentro de este nuevo plan? 

La formación de los y las profesionales de la psicología es el más adecuado para abordar las tareas que son objeto de este plan: son psicólogos y psicólogas con formación tanto sanitaria como educativa. 

¿Son suficientes dos equipos con seis psicólogos cada uno?

Lo ideal sería que hubiera de manera continuada un psicólogo o psicóloga en cada centro, de esta forma el alumnado tendría un referente dentro del centro para abordar cualquier malestar psicológico, trabajar en la prevención y en el abordaje temprano de cualquier situación relacionada con la salud mental. Permitiría tratar las cuestiones relacionadas con el bienestar psicológico de los chicos y chicas en su medio cotidiano, dar apoyo al cuerpo docente si lo precisan y servir de conexión con otros profesionales que pudieran intervenir si llegase el caso. Pero esto es lo ideal, esperemos que poco a poco se pueda llegar a todos los centros. De momento, trabajaremos con los seleccionados por la consejería.

¿Es la primera vez que entran los psicólogos en el sistema educativo para abordar la salud mental?

De esta forma en la que ahora se plantea la atención es la primera. Existen dos equipos de conducta, que puntualmente atienden al alumnado. También hay profesionales de la psicología en los equipos de orientación, si bien este perfil está más relacionado con lo pedagógico ya que lo pueden desempeñar otros profesionales también.

¿Por qué hasta ahora había reticencias a hablar de salud mental dentro de los centros escolares?

Cuando se habla de salud mental parece que ha de ser atendida siempre en los servicios sanitarios. Lógicamente aquellos trastornos graves van a tener que ser tratados en servicios especializados, pero muchas cuestiones que dificultan el día a día de chicos y chicas, surgen y se mantiene o se manifiestan en el lugar en el que pasan gran parte de su vida, donde aprenden a relacionarse, donde afrontan retos cada día, donde se enfrentan a situaciones de frustración, donde su personalidad se va desarrollando, donde su identidad se define y se manifiesta. Parece que es posible administrar medicación, curar heridas o vendar partes del cuerpo lesionadas dentro de un centro educativo, pero no atender problemas de ansiedad, impulsividad, autoestima, afrontamiento del estrés... Es muy importante poner el foco, no en la patología, sino en la persona y favorecer que la intervención pueda realizarse allí donde se ponen de manifiesto muchos de estos problemas y donde nuestros jóvenes pasan 8 horas al día mas de 170 días al año. 

¿Hay más problemas de salud mental entre los adolescentes ahora o es que se visualizan más?

Ciertamente la visibilidad que tienen estas cuestiones es muy grande. Ocupan amplios espacios de prensa, televisión, redes... y evidentemente hay que hablar de ello. Esconder el problema no es nunca una solución. Es muy importante abordar estos asuntos con todos los recursos que sean necesarios, está en juego la salud mental de nuestros chicos y chicas, su bienestar, su adecuado desarrollo como personas, en ocasiones su vida. No es una opción banalizar estos problemas, pensar que son cosas de la edad, o que siempre han sucedido. Hemos de escuchar a los jóvenes, atender a su malestar, prevenirlo y mitigarlo. 

¿Qué papel juegan las redes sociales en la salud mental del alumno?

Las redes sociales son un instrumento y puede usarse de manera facilitadora o de una manera inadecuada y perniciosa. Es muy importante entender que son la herramienta de comunicación que usan nuestros chicos y chicas, criminalizarlas no soluciona el problema. Hemos de poner el foco en cuestiones como el respeto a la diversidad, la empatía, la igualdad, los buenos tratos entre iguales. Si fomentamos estos valores, el uso adecuado de cualquier herramienta será una consecuencia lógica. 

¿Y qué consecuencias ha tenido la pandemia de covid?

La pandemia ha afectado de muchas maneras a la sociedad, el alumnado no va a ser ajeno a ello. En una etapa evolutiva en la que las relaciones sociales, el contacto con iguales, son muy importantes y todo ello se vio anulado de repente y sin un final claro marcado. Cambiaron drásticamente las condiciones de vida cotidiana, los niveles de incertidumbre aumentaron en todas las parcelas de la vida, han perdido la vida familiares, vecinos, amigos incluso. Las consecuencias más comunes han sido el incremento de los niveles de ansiedad, desesperanza, tristeza mantenida, duelos complicados, miedo, altos niveles de irritabilidad, fobias… 

¿Cuáles son las señales de alarma que se deben tener en cuenta tanto en el centro como en casa?

Aunque cada caso puede ser diferente, de forma general sería importante prestar atención a cambios drásticos en los hábitos (alimentación, sueño, niveles de atención). Cambios en el comportamiento, formas de relación, aislamiento, bajo rendimiento y sobre todo estar muy atentos a cualquier verbalización de malestar, es importante escucharles. H

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