La sombrilla

Están de los nervios. El trío de las Azores no sólo ha de aguantar el bochorno de las falsedades que esgrimieron para organizar la invasión de Irak, sino que ahora que se les ha caído el velo del argumento económico subyacente tras el ataque ilegal no logran atrapar a Sadam. El fantasma del sátrapa sobrevuela Irak y, según las tropas de ocupación, es el responsable de todo lo malo. Como antes. Pero sin salir en la tele. El asunto lleva el mismo camino que Afganistán y Bin Laden , con el problema enquistado y el malo en la sombra. Pero de la sombrilla.