Síguenos en redes sociales:

CONTINUA EL PULSO POR EL INCIDENTE NAVAL EN EL GOLFO PERSICO

EEUU se niega a canjear a 5 iranís detenidos en Irak por los marinos

Washington acusa a Teherán de crear la crisis para desviar la atención del contencioso atómico.

EEUU se niega a canjear a 5 iranís detenidos en Irak por los marinos

Estados Unidos, pese a mostrar su apoyo al Reino Unido en la crisis abierta por la captura de los 15 soldados británicos, intenta mantenerse oficialmente al margen. Según explicó Sean McCormack, portavoz del Departamento de Estado, Washington descarta un posible acuerdo con Irán para intercambiar a los rehenes por cinco supuestos miembros de la Guardia Revolucionaria detenidos en enero en Irbil y que están bajo custodia de las fuerzas de EEUU en Irak.

Washington acusa a los cinco iranís de formar parte de una red de suministro de armas y tecnología a los insurrectos en Irak. "Sé que ha habido fuentes anónimas iranís que han intentado involucrar en esto a EEUU sugiriendo un intercambio de personal", dijo McCormack, que aseguró que el asunto ni siquiera se ha discutido en las conversaciones que Washington está manteniendo con Londres sobre la crisis. El portavoz del departamento que dirige Condoleezza Rice insistió en la postura que Washington mantiene por el momento: "Este es un asunto entre el Reino Unido e Irán".

"DESVIAR LA ATENCION" McCormack sí denunció que la situación abierta es "un intento de Irán de desviar la atención" de los problemas en los que le ha situado su decisión de mantener activo su programa nuclear. Y sin querer profundizar en el debate sobre si el comunicado de prensa que emitió el jueves el Consejo de Seguridad es un gesto demasiado débil, McCormack dijo que la comunidad internacional está unida en el rechazo a la actuación de Irán en la crisis.

Las informaciones, luego desmentidas, de que el Gobierno de Teherán había abierto un proceso judicial a los 15 marinos hicieron saltar las alarmas en Londres. Un despacho de la mañana de la agencia IRNA fechado en Moscú y en el que se citaba a Gholamreza Ansari, embajador de Irán en la Federación Rusa, anunciaba el comienzo de los procedimientos legales contra los cautivos y que no se descartaba un juicio en Irán.

Inmediatamente después, la ministra de Exteriores británica, Margaret Beckett, calificó los comentarios del diplomático iraní de "inadecuados", y manifestó su deseo de que el proceso se solvente por la vía rápida: "Creo que todo el mundo lamenta que esta toma de postura haya surgido; lo que queremos es una salida pacífica y que sea lo más rápida posible".

MALA TRADUCCION La airada reacción de Londres motivó un inmediato desmentido del diplomático, que aludió la polémica a una mala traducción, al tiempo que negó haber mencionado siquiera la posibilidad de un juicio en su entrevista con la agencia iraní de noticias.

La jornada de ayer dio indicios de que la crisis podría estar entrando en su fase final. Beckett, quien envió una nota diplomática a Teherán aunque rehusó dar detalles de su contenido, declaró que las negociaciones habían entrado en una fase "un poco más calmada". Puede ser "un buen síntoma" que Irán "piense de nuevo cuál es la salida a esta situación", dijo Beckett desde la ciudad de Bremen (Alemania).

La nota fue bien recibida en Irán, que ayer celebraba el Día de la República Islámica. En un comunicado, el Ministerio de Exteriores iraní aseguró que en la misiva "varios puntos podían ser examinados". "Esperamos una actitud equilibrada de Gran Bretaña", concluyó.

Pulsa para ver más contenido para ti