Afganistán sugiere que Pakistán podía saber dónde estaba escondido Bin Laden

El Gobierno afgano sugirió hoy que Pakistán podía saber el lugar exacto donde vivía Osama Bin Laden antes incluso de la operación de las fuerzas especiales de EEUU que acabó con su vida en la ciudad norteña paquistaní de Abbottabad. "No solo en un país como Pakistán, con su espionaje sofisticado, incluso un país muy débil con un servicio de inteligencia débil habría sabido quién vivía en una casa cercana a una Academia Militar nacional", dijo hoy el portavoz afgano de Defensa, Zahir Azimi. "Si una agencia no sabe que a unos cientos de metros ha estado viviendo el terrorista más buscado del mundo, ¿cómo va a ser capaz de proteger sus armas estratégicas?", añadió Azimi en referencia al arsenal atómico paquistaní. En rueda de prensa, el portavoz afgano dijo que sigue siendo materia de especulación si el espionaje paquistaní ayudó a las fuerzas especiales de EEUU cuando estas acabaron con Bin Laden, en una casa de Abbottabad no lejana a la academia militar de Kakul. "Hay muchas preguntas que necesitan respuesta", agregó el portavoz, quien recordó que en Kakul reciben entrenamiento los oficiales del Ejército paquistaní y que muchos militares residen en viviendas de los alrededores. Distintos Gobiernos internacionales han expresado en las últimas horas dudas sobre si Pakistán proporcionó algún tipo de ayuda a Bin Laden desde su salida de Afganistán, a raíz de la invasión de ese país por parte de las tropas de Estados Unidos, en 2001. La invasión trajo el fin del régimen talibán, que daba refugio al líder de Al Qaeda, pero según los analistas la cúpula talibana sigue oculta en Pakistán, el país en el que, según el Gobierno afgano, debería tener lugar la "guerra contra el terrorismo". "Una vez más, afirmó ante la OTAN que la guerra ante el terror no se libra en Afganistán. Osama no estaba en Afganistán. Lo han encontrado en Pakistán", dijo el lunes el presidente afgano, Hamid Karzai, en su primera comparecencia tras la muerte de Bin Laden. Afganistán y Pakistán han mantenido unas relaciones muy delicadas en los últimos años, derivadas en parte de la apuesta que este último país hizo por el régimen talibán -enemigo de Karzai- y de un contencioso fronterizo que continúa sin resolverse.