Que la situación del ferrocarril en Extremadura es un lastre en el desarrollo económico de la región no es algo nuevo, pero es cierto que el problema de las comunicaciones es uno de los elementos que destacan tanto en el sector del turismo como de la propia administración como una circunstancia que está frenando el auge del turismo en la región. «Lideramos la llegada de turistas internacionales en España y lo hacemos sin un aeropuerto internacional, sin tener puerto marítimo y grandes cruceros, sin AVE y casi sin tren», asegura el director general de Turismo, Francisco Martín.
También se muestra categórica en esa cuestión Victoria Badaga (Fextur), que asegura que a pesar de que Extremadura tiene lo que quiere el turista internacional (naturaleza, gastronomía, patrimonio y buen trato) el problema sigue estando en llegar: «Tenemos lo que buscan pero el problema está en acceder a ese sitio en el que quieren disfrutar. Les obligamos a perder mucho tiempo en el viaje y eso nos perjudica», reconoce.
También señalan el problema de las comunicaciones desde Cetex: «Ni tenemos tren, ni tenemos unas carreteras en condiciones», reconoce Antonio Martínez.
Concepción Zamora, de Agtex, señala además que las comunicaciones perjudican la fidelización del cliente: «No puedes traer a un turista al Festival de Teatro Clásico de Mérida y que después de llegar a Madrid, el tren le deje tirado en Torrijos y tenga que ir por el campo, arrastrando la maleta para que le recoja un autobús. La imagen que damos es tercermundista y el problema es que ha pasado muchas veces», se queja. .r. c.
