Dan cheques sin fondos a cambio de las entradas de Sabina

La serie de despropósitos en el que se ha convertido la organización y posterior suspensión del concierto de Joaquín Sabina continuó ayer, día previsto para devolver a los 5.500 afectados el dinero de las entradas.

La primera sorpresa con la que se encontraron las personas que se acercaron al quiosco de la plaza de España fue que los cheques, cada uno de 25 euros, llevaban fecha de 3 de julio y que se podían cobrar a partir de ese día, lo que motivó las primeras protestas dirigidas al ayuntamiento, porque en la entrada aparece como patrocinador.

La concejala de Festejos, Begoña Saussol, se acercó entonces a la oficina de La Caixa, ya que al ser un cheque al portador se podía cobrar en el acto. Una vez allí, acompañada de varios afectados, le informaron de que hasta el 1 de junio no se podía pagar. Sobre la fecha del 3 de julio, resulta que es la del vencimiento del cheque, por lo que las personas que acudan después de este día se pueden quedar sin dinero.

Para más desesperación, La Caixa cobra 1,8 euros de comisión si el cheque se paga en cualquier sucursal que no sea la de Almendralejo, donde el director general de Producciones Musicales Extremeñas, Agustín Tarazona, tiene la cuenta. Además, en las devoluciones, dan un cheque por entrada y no uno por el valor de varias.

Ante esta situación, Begoña Saussol tomó la decisión que ya venía fraguando desde hace unas semanas, presentar una demanda colectiva por presunta estafa contra Agustín Tarazona, el empresario de Almendralejo que contrató el concierto de Sabina.

Por otro lado, abrió una oficina de reclamaciones en la planta baja del ayuntamiento, donde se recogen las firmas de las personas afectadas que quieran sumarse a la demanda.

RESPONSABILIDADES Por su parte, la concejala del PSOE, Carmen Yáñez, exigió responsabilidades "por la torpeza política y de gestión en todo lo ocurrido ¿Qué imagen dan de nuestra ciudad el equipo de gobierno del Partido Popular", se preguntó.

Yáñez recordó que el consistorio había puesto a disposición de la empresa recursos públicos, infraestructura y medios de comunicación "y no han vigilado la organización del concierto, ni si tenían los documentos y sin informarse de los antecedentes de la empresa", indicó.