DATOS DEL SES RELATIVOS AL SEGUNDO SEMESTRE DEL PASADO AÑO

La lista de espera para operarse sube un 63% pero la demora se mantiene

A 31 de diciembre había 3.316 pacientes esperando a una intervención quirúrgica, 1.290 más que a cierre de 2020. El tiempo medio se situó en 85 días, solo cuatro más que un año atrás, por el incremento de la actividad

El Hospital de Mérida, ubicado en la avenida Don Antonio Campos Hoyos.

El Hospital de Mérida, ubicado en la avenida Don Antonio Campos Hoyos. / EL PERIÓDICO

El aumento de la actividad en las intervenciones quirúrgicas ha hecho posible que se mantenga el tiempo medio de demora para entrar en el quirófano, aunque se haya producido un incremento significativo en el número de pacientes que están en lista de espera quirúrgica por especialidades. Según los últimos datos publicados por el Servicio Extremeño de Salud (SES), a cierre de diciembre de 2021 había 3.316 personas a la espera de someterse a una operación en el Hospital de Mérida, una subida del 63,6% con respecto al mismo periodo de 2020, cuando había 1.290 usuarios esperando.

A pesar de este aumento en la lista de espera, el tiempo de demora apenas ha variado, ya que a final del pasado año se situaba en 85 días de media para operarse, tan solo cuatro más que al cierre de 2020. Los pacientes están muy lejos de superar los máximos establecidos por la ley de tiempos de respuesta sanitaria para operarse, que son 180 días. Las especialidades que acumulan más retraso son Cirugía general (con una media de 128 días para entrar en quirófano), Oftalmología (87), Dermatología (87) y Otorrino (74).

El consejero de Sanidad y Servicios Sociales, José María Vergeles, explicó el pasado martes que, a nivel regional, en el último año se registró un «importante» incremento de la actividad en intervenciones quirúrgicas, consultas externas y pruebas. En este periodo, se realizaron 16.068 operaciones más (27,4%) en todo el sistema sanitario extremeño, pero no están disponibles los datos específicos del área de Mérida. 

En la rueda de prensa que ofreció para informar sobre las listas de espera en Extremadura, Vergeles también señaló que en el segundo semestre del pasado año se pretendió «aflorar» la «demanda oculta», que son las necesidades de intervenciones, consultas o pruebas a las que el paciente no acudió por miedo a infectarse o por retrasos en la actividad por las reestructuraciones de los servicios para atender al coronavirus.