Mariano López Santiago es uno de los residentes del Centro de Acogida de Cáritas, donde las personas que le atienden están consiguiendo que su estancia sea «muy buena». Llegó hace 15 o 20 días y el 20 de noviembre celebró allí su cumpleaños. «Mis compañeros me hicieron una pequeña fiesta y me hizo mucha ilusión. Me ayudan mucho; somos una familia», apuntó este residente, que puso en valor «el gran respeto que hay en este albergue».