Estaba llegando al centro de salud cuando vi salir a un usuario disgustado. Alegaba que el doctor no le había recetado ningún antibiótico para los síntomas que presentaba. Lo que este usuario probablemente no sabía es que el doctor le estaba ayudando al actuar de esta forma. El consumo de antibióticos sin la certeza de que la dolencia esté causada por una bacteria ha aumentado en los últimos años, y esto está creando graves problemas de salud en las personas. Un consumo indebido de estos fármacos o la interrupción antes de hora de su tratamiento es capaz de crear bacterias resistentes que se vuelven inmunes a sus efectos. Si esto ocurre, podemos contraer diversas enfermedades que puedan llegar incluso a provocarnos la muerte, ya que no existirá una medicación efectiva que pueda combatir la bacteria. Debemos tener conciencia de que la automedicación no es la mejor solución, y seguir siempre las instrucciones de un profesional.
