Termina el 2013 para el Arroyo y lo hace como empezó: con muchos problemas para completar una convocatoria. Las bajas han sido el leit-motiv del conjunto de Juan Marrero, que apenas cuenta con una docena de jugadores profesionales para el encuentro de esta mañana frente al Córdoba B (12.00 horas).

En el otro lado de la balanza está que el partido es el más sencillo que en teoría pueda tener cualquier equipo del grupo IV de Segunda B: el visitante es el colista de la categoría y solamente ha sumado tres puntos fuera de su estadio en lo que va de competición (empates en Almería, La Roda y El Palo).

Así es que los arroyanos apelarán a su comprobada fortaleza en el Municipal de La Luz, donde han conseguido la totalidad de los 20 puntos con los que, de momento, están fuera de la zona de peligro.

Willy y Chori Domínguez por lesiones de larga duración; Iban Espadas, Juanma Morán y Dani Peralta por otros problemas físicos; José Gutiérrez y Santi Polo por sanción, y Isaac Hagan, que ha abandonado el club, no están disponibles, lo que ha obligado de nuevo a Marrero a echar mano del filial. Una mínima compensación es que, tras recibir el visto bueno federativo, podrá jugar José Rodríguez, el central fichado en el mercado de invierno. Otro refuerzo como el delantero Rafa --anteriormente conocido como 'Fali'-- tendrá que esperar a enero.

Con una alineación de circunstancias, no se prevé un partido fácil. Además, el Córdoba B también juega en un campo pequeño y de césped artificial, una de las tradicionales armas del Arroyo.