El Barcelona cerró ayer por por 22 millones el fichaje del centrocampista argentino Javier Mascherano, que ha renunciado a 3 millones para cerrar el acuerdo. Mientras tanto, el club sigue pendiente de un acuerdo para concretar la marcha de Ibrahimovic al Milan.

El representante del jugador, Mino Raiola, aseguró anoche que el acuerdo para el traspaso de Ibra está casi cerrado. Descartada la cesión, el club azulgrana dejó claro que el jugador no se marcharía por menos de 40 millones. De no desembolsar el Milan esta cantidad, o una cifra cercana, Ibra seguirá en el Camp Nou, donde ya sabe que se convertirá en inquilino asiduo del banquillo. Un parado , eso sí, pagado a precio de oro: 12 millones por temporada, de las que aún le quedan cuatro por cumplir.

Mascherano llegará hoy a Barcelona y será presentado el lunes. El argentino será jugador culé para las próximas cuatro temporadas, en las que espera sumar títulos y hacerse con la titularidad en un espacio del campo actualmente reservado a Sergio Busquets.

Mascherano llega al Barcelona para ocupar la vacante que dejó hace unos meses Touré Yaya, quien como consecuencia de la imposibilidad de jugar todos los partidos y debido a una suculenta oferta, optó por fichar por el Manchester City.

Con la llegada de Mascherano, las necesidades del Barça "estarían cubiertas", según el técnico azulgrana, que necesitaba solo un mediocentro.