El Cacereño completó ayer su centro del campo con un futbolista que ha jugado las cinco últimas temporadas en Segunda División B: Rodrigo Martínez, Rodri (Valladolid, 15 de junio del 1993). Al puzzle del CPC le restaban cinco piezas para dejar la plantilla perfilada (que no cerrada, pues aún quedaría alguna ficha libre) y ayer puso la primera. Las otras cuatro son para un portero, un central y dos delanteros. El conjunto verde tiene claro lo que quiere (ha recordado su director general en más de una ocasión) y las negociaciones están muy adelantadas.
Rodri ha jugado la última temporada en el Lealtad de Villaviciosa, en el Grupo II de Segunda B. Sus cuatro campañas anteriores también han sido en la categoría de bronce, primero con el Zamora (2013-2015) y después en el Sestao River (2015-2017). En total, 135 partidos de experiencia en bronce que ahora tiene que poner en práctica un escalón más abajo, en Tercera, aunque con el único objetivo de volver a Segunda B.
«Es un jugador de creación, un centrocampista de carácter ofensivo y con mucho recorrido», explica el club verde en un comunicado. En la última temporada disputó 33 partidos, siendo uno de los futbolistas destacados del Lealtad.
Rodri es el cuarto fichaje del Cacereño este verano, el tercero que ha jugado en Segunda B en la campaña 2017-2018 tras Chechu y Eloy Jiménez, ambos procedentes del Badajoz. Forma parte de la estrategia del club de profesionalizar la plantilla con futbolistas de superior categoría que claramente aspiren al ascenso.
Por otro lado, la plantilla inició ayer su segunda semana de entrenamientos, que concluirá el sábado con el primer amistoso del verano, ante el Moraleja Cahersa a las 20.00 horas en el Campo La Vega. El siguiente será ante el Coria el 1 de agosto en el campo de La Isla y el día 5 el CPC jugará la Copa Federación.
También sigue en marcha la campaña de abonados. De momento, son casi 200 las personas las que se han pasado por la oficina del club para sacar su abono.
