Hay un Cacereño con Gaspar y otro sin él. La ausencia del mediapunta el pasado domingo en Lucena obligó al técnico verde a variar sus planes y trastocar el dibujo del equipo sobre el campo. Este fin de semana tendrá que repetir otra vez, pues el jugador no estará listo para medirse a La Hoya Lorca (El Cuartillo, 16.30 horas).

Lo confirmó él mismo minutos antes de recibir una nueva sesión de fisioterapia. "No estaré para jugar el domingo; ayer por el lunes no entrené y mañana por hoy tampoco podré hacerlo. El doctor me dijo que debía tener dos semanas de reposo", añadió el jugador, que espera empezar a entrenar con normalidad la semana próxima.

EDEMA EN LA ROTULA Gaspar sufre un edema en la rótula, "como una herida en el hueso", explica. Se la produjo durante un partido de pretemporada, en Guijuelo, y aunque había dolor, podía jugar. Pero hubo un momento que el dolor empezó a aumentar y ante El Palo --el último encuentro que ha disputado-- tuvo que jugar infiltrado. Después de eso, paró. La ausencia de Gaspar, unida a la de Martins, que vuelve este domingo tras cumplir su partido de sanción, provocó una pequeña revolución en el once . Entraron Valverde y José Ramón en sustitución de los ausentes, aunque también jugó de inicio Iván Pérez, siendo Toni el damnificado. El jugador vitoriano tuvo que ser retirado en el minuto 44 por un fuerte golpe, del que ya está recuperado. El resto de jugadores, Vargas, Palero, Gonzalo, Mejías, Pizarraya, Checa y Raúl Medina, no los tocó el técnico. Han sido fijos en los cuatro partidos que se han disputado.

Gaspar cree que ya ha llegado la hora de romper la maldición de El Cuartillo . El no estará, pero cree que sus compañeros serán capaces de poner fin a la racha negativa en casa. "Estamos haciendo lo más difícil, ganar los puntos fuera; y lo que teóricamente es más fácil, ganar los de casa, se nos está escapando. Creo que ahora tenemos una buena oportunidad para acabar con eso".

La clave, según el cacereño, será aprovechar las ocasiones, el gran debe del equipo hasta ahora. "Las estamos creando, que es lo más difícil. Nos falta definirlas. Y podemos hacerlo, porque hay muy buen equipo", añade. Mejorar la defensa, cinco goles en casa en dos partidos, es el otro debe.