Pedro Pablo Braojos alerta sobre la presión de ejerce el Jaén, rival de mañana del Cacereño. El técnico destaca que el conjunto andaluz "intenta siempre robarte el balón en su propio campo y montar rápidamente un ataque sin darte mucha opción a reaccionar".

Braojos reconoce que el Jaén "no tiene grandes individualidades", pero estima que es un oponente "muy sólido que ha empezado bien la temporada, a pesar de que no haya ganado en los dos últimos partidos".

Nadie puede discutirle que conoce bien esa plaza. En la Nueva Victoria que mañana volverá a pisar entrenó en Segunda División (temporada 2000-01). "El club ha pasado malas épocas en lo económico y ahora parece mejor. Como nombre, es uno de los más grandes de la categoría, eso está claro", recalca.

La victoria verde del pasado domingo ante el Poli Ejido ha tenido efectos balsámicos y que sacar algo positivo de este viaje reforzaría la sensación. Braojos es optimista, enfatizando el clima de felicidad que según cuenta ha reinado esta semana en el Príncipe Felipe. "Está claro que un triunfo te da tranquilidad. La actitud no ha cambiado porque siempre ha sido buena", explica.

A falta del último entrenamiento, la única ausencia segura es la de Palero, sancionado. Será suplido por Jaraíz. Tomás regresará al centro de la defensa. La única duda es la de Samuel. Arrastra molestias y, si no se recupera, la alternativa es la polivalencia de Dieguito.