El CAEP Soria, o lo que es lo mismo, la concentración permanente de las mejores jugadoras españolas en categoría júnior, terminó ayer con la inmaculada racha de victorias del Extremadura Arroyo en su propio feudo, al imponerse en un disputado partido por el tanteo final de 2-3 (25-22, 25-22, 23-25, 21-25 y 9-15).

El cuadro extremeño fue claramente de más a menos y terminó siendo derrotado por un equipo con una media de altura muy superior a la suya, y que además supo reinventarse a sí mismo, para ser capaz de concretar su mayor envergadura.

Bruna Paixao fue el principal referente ofensivo del equipo extremeño (17 puntos), seguida de Inma Lavado (15) y Yohana Rodríguez (14).

El partido comenzó con claro dominio del cuadro cacereño, superioridad que le serviría para anotarse los dos primeros juegos por idéntico tanteo (25-22).

A partir del tercer set cambió la decoración del partido. La formación castellano-leonesa que dirige el seleccionador femenino español, Pascual Saurín, comenzó a sentirse más cómoda en la cancha, su bloqueo (apartado en el que doblegó a su rival, 7 por 15), se volvió mucho más infranqueable, y sus ataques se volvieron en muchas ocasiones indefendibles para la escuadra de Arroyo de la Luz, sobre todo por zona ‘4’, donde Montoro y Camino dictaron su ley.

Lavado y Yohana mantenían en labores ofensivas a un Extremadura Arroyo que ayer echó de menos la producción en ataque y en defensa en primera línea de Isabela Quiuqui.

Tras empatar el partido a 2 juegos, el CAEP Soria, que venía de una dinámica mucho más positiva en las mangas anteriores, entró en la cancha con paso firme en el quinto set, llevando siempre al iniciativa en el marcador (3-5, 5-8, 8-14), hasta que cerró el encuentro con 9-15.

El conjunto cacereño que entrena Adolfo Gómez descansará la próxima jornada y tendrá que esperar a ver qué resultados depara ésta para afrontar el último partido en Sestao sin apenas margen de error.