En plena jornada de elecciones generales, en Almendralejo ayer se seguía más hablando de fútbol que de política. Los ecos y el estruendo generalizado que había dejado la victoria del Extremadura por la mínima sobre el Tenerife todavía retumbaban en los oídos y el corazón de los almendralejenses que tuvieron la fortuna de ver en directo el espectáculo de partido. Muchos (por no decir todos) coinciden en señalar que no hubo semejante ambiente de presión desmedida en toda la historia del fútbol de Almendralejo. «Hemos tenido llenos. Muchos. Pero de la manera que se entregó la afición ayer, eso en la vida», decía uno de los seguidores antiguos del Extremadura. De los que ya saborearon las mieles de la Primera División: «parece mentira que volvamos a vivirlo de nuevo».
Sorprendido Manuel Mosquera, que agradeció a su gente el titánico esfuerzo de animación durante todo el partido. «No sé cuántas manos había hoy en el campo, pero eran muchísimas», decía entusiasmado. Vibrante el presidente, Manuel Franganillo, que reconocía no haber vivido algo igual. Y atónitos los jugadores, que se quedaron emocionados de la caldera azulgrana. «He vivido el mejor momento de mi carrera deportiva», llegó a afirmar Gio Zarfino, héroe de la afición.
El uruguayo es la esencia viva de lo que ama el público de Almendralejo: raza, entrega, coraje, pundonor, fe. «Cuando encendieron los celulares me quedé loco», decía recordando una estampa única con todo el estadio y las luces de los teléfonos móviles encendidas.
La afición, terminado el partido, no quiso marcharse. Se quedó cantando y jaleando a los suyos, momento que aprovechó Zarfino para sacar a su tío venido de Uruguay. El famoso ‘Chiqui’ se dio un baño de masas ante la algarabía azulgrana. Uno más en la fiesta.
Zarpazo
Por si fuera poco, la jornada ha sido redonda para los intereses del Extremadura que amplía su colchón de puntos a cinco sobre el descenso. La derrota del Lugo ayer en Las Palmas deja al Extremadura cinco puntos por encima de los gallegos con 18 todavía en juego y un Extremadura-Lugo a falta de tres jornadas que puede ser decisivo.
Además, el Extremadura también ha metido por debajo en esta jornada a Numancia, Tenerife y Rayo Majadahonda. Con los dos últimos tiene ganado el golaveraje particular, aunque no con el cuadro soriano.
Además, Córdoba y Nástic de Tarragona tienen casi nulas opciones de alcanzar ya los guarismos del Extremadura, salvo hecatombe azulgrana en el último tramo de temporada, cosa casi improbable visto el poderío mental que tienen los de Almendralejo.
Otro nombre propio fue el de Kike Márquez, tantas veces cuestionado como venerado. El diez de Sanlúcar lleva dos meses imponente, siendo líder en el ataque azulgrana desde la marcha de Enric. Marcando, asistiendo y oxigenando a su equipo.
Manuel, premio al esfuerzo y entrega, ha recompensado a los suyos con dos días libres. El Extremadura volverá mañana por la tarde a los entrenamientos para preparar el partido del sábado en Tarragona. Lo hará sabiendo que, una victoria, puede darle media salvación.
