Angel Marcos mantiene el suspense sobre quién ocupará la portería del Cacereño mañana ante el Celta B: ¿Pablo Vargas tras pedir el cambio tras su error ante el Guijuelo que costó el 0-1 o Antonio David Montiel, su sustituto aquel día?

"No he hablado con ellos todavía y no voy a hablarlo aquí", respondió ayer ante los periodistas. Preguntado por el estado ánimo de Vargas, primero dijo que estaba "bien" y luego amplió a "fenomenal". "Los compañeros han estado muy encima de él, animándole. Es lo importante. Tiene que recuperarse por el bien de su equipo. No podemos estar con la cabeza gacha y que nos vengan fantasmas de nuestros problemas", añadió el técnico de Serradilla. "Tiene que estar al cien por cien, como todos los demás", explicó.

Marcos defendió a su portero con una analogía. "Si fallamos en el minuto 94 un gol a bocajarro, como sucedió ante el Guijuelo, no se comenta. Y, sin embargo, si falla el portero, se acentúa más. Es el puesto más cruel".

Y al mismo tiempo intentó mimar a Montiel. "El domingo jugó y el equipo siguió igual. No se notó. Si tiene que jugar, como ha pasado alguna vez más esta temporada, no va a haber ningún problema". Y es que, argumentó, "tenemos dos porteros de nivel alto, aunque con características distintas".