Nacho Méndez, el último fichaje del Cacereño, ya está a las órdenes de José María Rebollo. El centrocampista asturiano de 28 años realizó ayer su primer entrenamiento y antes de saltar al terreno de juego manifestó su «ilusión» por poder jugar en Cáceres, donde quiere «luchar por el ascenso». «Con él damos totalmente por cerrada la plantilla», recalcó José Luis Tamargo, que manifestó su confianza en el entrenador. «Coincidimos plenamente en todo». Antes ya lo había hecho, a través de las redes sociales, Álvaro López, máximo responsable de IQ Finanzas.

Nacho Méndez es un medio centro que también puede jugar de media punta que ha firmado por el Cacereño por dos temporadas, las mismas que tenía en el Real Avilés con IQ. «Tiene una calidad exquisita, es muy técnico, un buen pelotero con un último pase fabuloso», contó Tamargo del jugador.

Nacho Méndez es el último fichajes, pero puede que no el último movimiento, ya que Carlos López ha pedido salir del club en busca de los minutos que no consigue en el Cacereño. «Saldría cedido», dijo el director deportivo, la misma fórmula que se busca para Mario Hormigo, Javi Durán y Kevin Trevejo, los primeros descartes. Tampoco es segura la continuidad de Juan Carlos Gimeno, uno de los jugadores llegados de la mano de Tamargo: «Está a prueba y será Rebollo el que decida si sigue o no».