David Cuerva espera estos días destino. Sabe que el mercado "tiene ahora poco movimiento". Con ello apunta de inicio: "nadie del Cacereño me ha llamado". "Me han salido cosas de Segunda B, pero me gustaría quedarme por aquí". Las frases del mediocentro verde (38 partidos este año) suenan diáfanas en cuanto a deseo. Las realidades sobre su futuro llegarán en las próximas semanas.

"No descarto nada", dice Cuerva, sin duda uno de los jugadores más regulares del equipo. Ni siquiera seguir en Cáceres para intentar resarcirse de un año para olvidar en lo colectivo, con el descenso a Tercera. "Un club como el Cacereño tiene que estar, mínimo, en la Segunda B", proclama.

Con 25 años, el futbolista ha cumpletado su sexto año en Segunda B con buena nota en cuanto a regularidad, pero bajar de categoría lo minimiza todo. "Me encantaría que se hiciera un proyecto fuerte para intentar subir otra vez", dice este canterano del CPC que el pasado año regresó a casa tras un periplo que incluyó los filiales de Villarreal, Rayo Vallecano y Elche.

"Los tres extremeños de Segunda B están haciendo buenos proyectos y seguro que van a hacer un buen año. De Mérida y Extremadura conozco a los dos entrenadores". En el caso de los azulgrana, coincidió con su nuevo técnico, Diego Merino, cuando éste era el técnico del Rayo juvenil y el futbolista jugaba en el filial. ¿Jugar en el Extremadura, el Mérida o el Villanovense? El no lo desdeñaría.

Sobre lo sucedido en el Cacereño, abunda: "ha sido muy difícil, con problemas, y pagamos caro tener una plantilla tan corta". Ahora desconoce cúales son las intenciones de la entidad. "Si no hacen un proyecto fuerte, va a ser bastante complicado que se queden jugadores del año pasado".