La liga en el grupo IV de Segunda B comienza a lo grande para el fútbol extremeño. Nada más y nada menos que con un derbi entre dos equipos con solera y cuyos objetivos iniciales pasan por asegurar la categoría, aunque quizá en los planes serones haya un papel más ambicioso. Extremadura y Villanovense debutan esta tarde (20.30 horas) en el estadio Francisco de la Hera de Almendralejo, que seis años después vuelve a ser de bronce. El duelo se presenta tan igualado como incierto, pues las pretemporadas de ambos han sido más ante rivales de categorías inferiores que del propio grupo, algo que les ha impedido calibrar con exactitud el potencial que van a tener enfrente cada domingo. Es un envite inédito en Segunda B.
Ilusión y humildad se respira en el entorno del Extremadura, que tiene la lección aprendida de lo que lo ocurrido en 2011cuando descendió. Su único objetivo es la salvación, algo que repiten desde el club por activa y por pasiva. Sus últimos dos test antes el Mérida, saldados ambos con empates, le ha dejado buenas sensaciones: "llegamos en buen momento. Aunque es pronto, el equipo está asimilando cómo debe jugar y está creciendo dentro de una idea definida", asegura su técnico, Diego Merino. El emeritense debuta en partido oficial en el banquillo azulgrana y ha dejado un mensaje muy claro en la previa para conseguir el objetivo final: "mis jugadores deben concienciarse de que han de ser humildes y trabajadores. Eso es lo único que nos llevará a obtener resultados", asevera.
CONCENTRADO No ha ofrecido lista de convocados el cuadro azulgrana, ya que al jugar en casa están todos citados antes del encuentro. Están confirmadas las bajas de Sergio y Manu Martínez. El primero arrastra sanción de la pasada campaña y el segundo tiene un esguince de tobillo. Es duda el montenegrino Savo Gazivoda, cuya documentación de la ficha aún no estaba formalizada a día de ayer. Ante la ausencia de laterales derechos, Merino puede apostar por José Rodríguez o el argentino Dylan, que es del filial pero ha rendido a buen nivel en verano. Sobre el Villanovense, Merino conoce bien la veteranía de su plantel y es consciente del gran estado de forma de sus jugadores de banda como Carlitos Andújar o Mustafá, además de la peligrosidad de los centros laterales a Carlos Fernández.
ILUSIONADO El Villanovense arranca una de sus temporadas más ilusionantes. El club ha dado un paso hacia la profesionalización y eso se ha notado en la plantilla. Esto se ha contagiado en el aficionado, superando por primera vez la cifra del millar de socios antes de iniciarse la liga.
En lo deportivo, Manolo Sanlúcar sigue defendiendo una idea de juego donde su equipo tenga la iniciativa y controle la posesión, aún siendo una apuesta menos común. Para el choque de esta tarde, el técnico cuenta con las bajas de Espín y Elías, ambos con sanciones que arrastran del ejercicio anterior. Tampoco está el tercer portero, Joaquín, lesionado en pretemporada. Javi Sánchez y Valverde, entre algodones durante la semana, podrían forzar, apuntando más a titular el primero ante la ausencia de efectivos en defensa.
Sanlúcar se ha referido al Extremadura como un equipo que "trabaja bien en colectivo y da gran importancia al aspecto táctico". Dice que son dos equipos diferentes, pero con similitudes como el hecho de ser "generosos en el esfuerzo y verticales".
