Dos norteamericanas de distinto carácter. Una, sonriente y abierta; la otra, tímida y de pocas palabras. Pero tanto Akela Maize como Shacobia Barbee se mostraron educadas e ilusionadas en su presentación con el Nissan Al-Qázeres Extremadura. Fue apenas tres días antes del debut en la Liga Dia frente al Baxi Ferrol en Torrejón de Ardoz. Serán fundamentales en la suerte del equipo.

Maize, pívot de 1,95 y 22 años, juega por primera vez en España tras salir de la universidad. «Estar en Cáceres es una gran experiencia para mí. Reconozco que no sabía muy bien dónde venía, pero me está gustando mucho. Todo el mundo me está tratando muy bien y tengo muchas ganas de empezar la competición», comentó.

Jesús Sánchez, su entrenador, le reserva un papel con más protagonismo ofensivo del que estaba acostumbrada en su anterior etapa. «Normalmente he sido defensora y reboteadora, pero estoy contenta también de poder anotar», dijo, sorprendida de «entender mejor el español de lo que esperaba».

Por su parte, Cobi Barbee (alero, 24 años, 1,80) cumplirá su tercera campaña en España tras su paso por Ferrol y Zaragoza. Le cuesta más hablar que a su compatriota, pero también aseguró estar contenta con su nuevo club y ansiosa por el estreno oficial.

«Este es un equipo que me gusta, sobre todo por la mezcla entre jugadoras jóvenes y veteranas», declaró, satisfecha por repetir vestuario con Pao Ferrari y Gaby Ocete, como pasó en el Mann Filter. «Las conozco bien y con el resto también voy conectando. Siento cómo el equipo va creciendo», apostilló.