HOLANDA: Van der Sar; Heitinga, Stam, Bouma, Van Bronckhorst; Seedorf (Van der Vaart, m.86), Cocu, Davids; Van der Meyde (Reiziger, m.79), Van Nistelrooy y Robben (Bosvelt, m.59).

REPUBLICA CHECA: Cech; Grygera (Smicer, m.24), Jiranek, Ujfalusi, Jankulovski; Poborsky, Galasek (Heinz, m.62), Rosicky, Nedved; Baros y Koller (Rozehnal, m.75).

GOLES: 1-0, m.4: Bouma. 2-0, m.19: Van Nistelrooy. 2-1, m.23: Koller. 2-2, m.71: Baros. 2-3, m.88: Smicer.

ARBITRO: Manuel Mejuto González (ESP). Expulsó al holandés Heitinga.

La República Checa, con un derroche de ambición y una apuesta decidida por el fútbol de ataque, consiguió remontar un 2-0 adverso ante Holanda, se hizo con la victoria (3-2) y se convirtió en la primera selección clasificada para los cuartos de final de la Eurocopa de Portugal.

Holanda es la cruz de la moneda. Con sólo un punto después de dos partidos, está al borde del abismo. En la última jornada del grupo D se enfrentará a Letonia, la selección más débil, pero sus esperanzas de estar entre los ocho mejores del torneo dependen ya de lo que suceda en el próximo enfrentamiento entre alemanes y checos.

CON MUCHAS GANAS Los holandeses afrontaron el duelo con ánimo de revancha. Los checos les habían obligado a jugar la repesca para llegar a Portugal y los jugadores de Dick Advocaat querían resarcirse de aquella humillación, pero volvieron a doblar la rodilla ante un rival que puede llegar muy lejos.

Después de un aviso de Jan Koller en el segundo minuto de partido, una falta lanzada por Robben desde la derecha sirvió a Bouma para estrenarse. El equipo que dirige Karel Bruckner acusó el golpe. Anduvo a la deriva un buen rato, sin que nadie fuese capaz de dirigir las operaciones, ni Pavel Nedved, ni Tomas Rosicky, ni Karel Pobotrsky, y estuvo a merced de su rival durante un cuarto de hora, hasta que llegó el segundo tanto holandés en el minuto 19. Lo firmó Ruud van Nistelrooy.

Entonces reaccionó la selección checa y Koller, después de una internada de Milan Baros, puso el 2-1 en el marcador con un disparo a puerta vacía.

El segundo acto fue lo mejor que se ha visto en esta edición de la Eurocopa. Los checos, volcados al ataque dirigidos por Rosicky. Lo holandeses, agazapados atrás. Los checos equilibraron la balanza en el minuto 71 con un golazo de Milan Baros, que fusiló a Van der Sar con un derechazo.

Holanda se quedó en inferioridad numérica en el minuto 75 porque Heitinga fue expulsado y Smicer con un gol en el minuto 88 apuntilló.