La normalidad que puede desprender un árbol en un parque, una fuente en un patio de colegio o un balón en un campo de fútbol es la que desprende Enric Gallego en el vestuario del Extremadura. Al pichichi de Segunda no le deslumbran ni los focos ni las decenas de entrevistas que ha tenido que atender esta semana. La historia que relató el Periódico Extremadura sobre sus orígenes ha tomado brillo con los goles del Gigante catalán. Y claro, esas cosas, no pasan desapercibidas para los medios nacionales. De la Morena en el Transistor de Onda Cero, infográficos en el diario Marca o un reportaje curioso de Deportes Cuatro en el día de ayer. «Salen muchas cosas en todos lados, pero yo lo llevo con naturalidad. La única diferencia entre antes y ahora son los goles. Nada más», se despacha el Gigante. Una diferencia muy considerable piensan todos.
El punta catalán pasó ayer por sala de prensa y lo dejó claro: «para mí es una semana normal. Sólo pienso en el partido ante el Mallorca que sabemos que será muy difícil». Es inevitable no ver todo lo que sucede a su alrededor... «claro que lo leo. Me mandan muchas cosas mis familiares y muchos enlaces, pero cuando he estado épocas sin marcar nadie se acordaba de ti. Es algo normal».
Un dato demoledor es que Enric Gallego se ha convertido en el cuarto jugador de toda la liga con más faltas cometidas, un indicativo del derroche físico del delantero a la hora de presionar arriba durante todo el encuentro. Sobre si ahora tiene más responsabilidades, Enric despeja balones: «sinceramente, creo que no. Tengo las mismas responsabilidades que cuando llegué».
El Gigante se levanta, saluda a todos los periodistas, charla con ellos y se va, con cortesía y educación. Con total naturalidad.
Enric y sus compañeros harán hoy el último entrenamiento antes de volar por la tarde a Palma de Mallorca. En ese vuelo no estará Fausto Tienza, al que se le esperaba para el partido en Son Moix, pero que finalmente no se ha recuperado de su microrrotura en el isquiotibial. Su baja se une a las conocidas de Alex Barrera y Granero
La principal duda a día de hoy es Roberto Olabe, que se ha ejercitado entre algodones y hasta este viernes no se conocerá si puede jugar.
Ante las ausencias en el centro del campo, Sabas estuvo probando ayer con Liam, un jugador del filial de Costa de Marfil que está gustando. Tiene muchas opciones de ir convocado. También entrenaron los juveniles Semed y Emmanuel.
