VALENCIA: César; Miguel, Dealbert, Navarro, Mathieu; Pablo Hernández, Albelda (min. 88, Maduro), Banega, Mata; Silva y Miku.

BARCELONA: Valdés, Alves, Puyol (Márquez, min. 60, Piqué), Abidal, Yayá, Xavi (Sergioi Busquets, min.80), Keita, Messi, Iniesta y Pedro (Bojan, min.75).

ARBITRO: Pérez Burrull (colegio cántabro). Tarjetas amarillas a Miguel, Albelda, Miguel, Alves, Puyol y Piqué.

INCIDENCIAS: Gran ambiente en el estadio de Mestalla, con el público totalmente entregado con su equipo.

En un duelo de calidad, faltó la guinda del fútbol, el gol, y Valencia y Barcelona se repartieron los puntos en un partido de ida y vuelta, en el que ambos tuvieron opciones de conseguir los tres puntos. Puede que los dos también dieran por bueno el reparto de puntos, que para el Barcelona significa seguir en el liderato de Primera, aunque el Madrid esté ya más cerca.

La primera parte tuvo escasas ocasiones de gol por parte de unos y otros. Con demasiado respeto ambos y con los goleadores ausentes por distintos motivos (Villa finalmente ni se vistió e Ibrahimovic estaba en el banquillo), el dominio fue más de los azulgrana, ante un Valencia que lo basó todo al contrataque con los ´bajitos´ Pablo Hernández, David Silva y Mata.

Los levantinos, en cualquier caso, fueron más directos e incluso Valdés se erigió en uno de los mejores de su equipo en este primer acto.

El segundo tiempo tuvo un fútbol loco, de fútbol muy directo, pese al toque azulgrana. El equipo visitante pareció adueñarse del choque en el primer tercio de este segundo acto, pero el Valencia, a la contra, estuvo siempre más cerca del gol.

La mejor opción estuvo en las botas de David Silva, que se encontró con un gran Valdés en el mano a mano. Corría el minuto 15 y los levantinos seguían dispuestos a darlo todo para contentar a su entregada hinchada.

Levantinos y catalanes alternaron sus ritmos en la última parte del encuentro, en el que hubo posibilidades de romper el equilibrio por parte de ambos conjuntos. La entrada de Bojan permitió algo de más movilidad en la delantera del líder, pero eso no se tradujo en definición en el momento definitivo. El portero extremeño César apenas tuvo que intervenir ante opciones realmente complicadas en su área. Al final, reparto justo y aparente satisfacción.