Manchester seguirá dividida, quizás incluso un poco más. El primer derbi de la era Pep Guardiola y José Mourinho en la ciudad terminó con un vencedor meritorio, un City demoledor en el primer acto del partido, que pudo sentenciar antes de hora, pero que presenció después la enésima resurrección de un club que tiene mil vidas. Un tanto afortunado de Ibrahimovic enloqueció un partido que los pupilos de Pep habían comandado con notoria superioridad. En el clima más tenso posible, aprendiendo también a sufrir, el City supo conservar lo que previamente había conquistado. Manchester se lo pasó en grande en el encuentro más emocionante de los últimos tiempos y ya pide más minutos de una rivalidad futbolísticamente apasionante.

Una hora antes del silbido inicial José Mourinho enseñó sus predecibles cartas. Los centímetros y fortaleza de Fellaini y Zlatan no iban a ser su única arma. También planeó un contraataque feroz con los velocistas Jesse Lingard y Henrikh Mkhitaryan, que sentaron a Juan Mata y Anthony Martial, protagonistas habituales en los onces del portugués. Pep Guardiola fue, por una vez, predecible en la composición de su alineación. Claudio Bravo debutó bajo los postes. “Esta clase de jugadores con experiencia no tienen problemas”, apuntaba el día anterior ante la poca preparación del chileno, que solamente se ha entrenado dos días. Y el jovencísimo Kelechi Iheanacho suplió al ‘Kun’ Agüero, sancionado, en la punta de ataque.

El último en saltar al césped, Pep, fue abucheado en una caminata de 30 segundos hacia la zona de banquillos. Allí le esperaba Mou. Ambos chocaron las manos y se abrazaron en un gesto cariñoso que duró un instante.

BAILE DEL CITY

El choque de estilos fue evidente desde los primeros compases. Un City valiente, en campo contrario, dominaba el balón y el partido. El United salía como un demonio tras cada robo en el centro del campo, pero con excesivo nerviosismo porque no está acostumbrado a que le sometan a otras voluntades. Tras un cuarto de hora, un balón largo enviado por Kolarov se coló en el corazón de la defensa local, Blind y Bailly no midieron bien y De Bruyne se aprovechó de la circunstancia. Tiro raso, seguro, que batió a De Gea e hizo explotar de júbilo a los 2,000 aficionados citizens de la grada: “Guardioooola, we have got, Guardiooola”, cantaban repetidamente.

El City bailaba en Old Trafford, con el fútbol más reconocible que pregona su entrenador. Silva y Fernandinho al mando, De Bruyne en el último tercio, desquiciaban a los de Mourinho con un juego exquisito. El segundo gol no se hizo esperar. Kelechi recogió del poste un envío del belga y lo empujó a la red. Sin embargo, cuando parecía muerto, el United volvió a demostrar que puede resurgir de cualquier situación imaginable. Un error de Claudio Bravo, al que se le escapó el esférico en un centro lateral, permitió que Ibrahimovic rematara de volea y redujera distancias antes del descanso.

EL UNITED, VOLCADO

La dinámica avasalladora citizen se transformó en un intercambio de golpes que tuvo distinta respuesta. Mourinho quería potenciarlo y dio entrada a Rashford y Herrera. Guardiola quería control y sustituyó a un delantero, Kelechi, por un centrocampista de contención, Fernando. El United se sintió más cómodo en el trance, la locura. Mark Clattenburg anuló un gol a Rashford por fuera de juego posicional de Zlatan. De Bruyne remató al poste tras un envío de Leroy Sané, que debutó de forma oficial. El nerviosismo era extremo en la grada, también en el área técnica. Guardiola salía, se sentaba y corría al césped de nuevo. Mourinho administraba los gritos.

Acabó el partido con defensa de tres el United, los locales volcados sobre el área citizen y la sensación en el estadio que vivirían otro tanto mágico. No llegó. Los jugadores de Guardiola se fundieron en un abrazo grupal. El City había conquistado la fortaleza de Mou.

Manchester United, 1 - Manchester City, 2

Manchester United: De Gea, Valencia, Bailly, Blind, Shaw (Martial); Pogba, Fellaini, Mkhitaryan (Ander Herrera), Rooney, Lingaard (Rashford), Ibrahimovic.

Manchester City: Bravo, Sagna, Otamendi, Stones, Kolarov, Fernandinho, Silva, De Bruyne (Zabaleta), Sterling (Sane), Iheanacho (Fernando), Nolito.

Goles: 0-1, De Bruyne (m. 14); 0-2, Iheanacho; 1-2 (m. 36), Ibrahimovic (m. 43)