"Creí que el 2-1 era corto y después una lesión nos ha trastocado el partido". El entrenador del Cacereño, Angel Marcos, se lamentó de la jugada puntual que supuso el 2-2 como una de las claves de un partido "loco en los últimos 15 minutos". Para Marcos, su equipo había sido "merecedor de la victoria" porque tuvo sus oportunidades con el 2-1. El técnico insistió en lamentar una acción "impensable" y alabó la disposición y la capacidad de respuesta de los suyos.