La victoria por 8-12 ante China llegó en el último partido de España de la fase de grupos. El excesivo cloro por el raro color de la piscina y el sol de cara no fueron rivales para las jugadoras de Miki Oca, que se impusieron desde el principio. El gran partido de Laura Ester en la portería y la efectividad de cara a meta fueron claves a la hora de firmar esta victoria. España fue por delante siempre, pero no consiguió nunca despegarse en el marcador.