El Jerez ya prepara exhaustivamente el partido de vuelta frente al Villarreal C (domingo, 19.00 horas), tras lograr en la ida un valioso empate en la Ciudad Deportiva del club castellonense (1-1). El tanto de Yeyo en el minuto 89 puede valer su peso en oro y otorga muchas esperanzas para pasar a la siguiente eliminatoria de la fase de ascenso a Segunda División B, pero aún queda un encuentro entero para seguir luchando.

Tras un largo viaje en autobús, la plantilla se ejercitó suavemente en la tarde del lunes. Ayer martes hubo descanso y hoy miércoles volverá a entrenarse. La única baja continuará siendo la de Pablo Morales, ligeramente lesionado. El resto está a disposición del técnico Agustín Izquierdo.

Se espera más público en la Ciudad Deportiva Manuel Calzado que lo que ha sido en la liga regular. Los socios pagarán 10 euros, los no abonados 15 y los jóvenes de 14 a 18 años, 5.

LESION IMPORTANTE En el filial del Villarreal, muchas miradas están centradas en lo que le ocurra a su portero titular, Diego Mariño, que se lesionó en el minuto 5 del partido del domingo y tuvo que ser sustituido por su habitual reserva, Jorge Palatsí. Mariño es uno de los mejores metas españoles en las categorías de formación, siendo internacional juvenil.

Tras el 1-1, el entrenador del conjunto amarillo, el exportero José Francisco Molina, manifestó abiertamente que no veía perdida la eliminatoria en absoluto perdida y que su equipo lucharía hasta el final.