El español Jorge Lorenzo (Aprilia) se clasificó en tercera posición en los entrenamientos oficiales de 250 c.c. del Gran Premio de la Comunidad Valenciana, dos puestos por delante de su único rival en la lucha por el título mundial, el italiano Andrea Dovizioso (Honda)
El español ha llegado a la última prueba del mundial con 13 puntos de ventaja sobre el transalpino, que impidió con una victoria en el Gran Premio de Portugal que Lorenzo se proclamara campeón del mundo hace quince días en el circuito de Estoril.
La sesión estuvo dominada por el japonés Hiroshi Aoyama (KTM), que logró la ´pole´ provisional, seguido del compañero de equipo de Lorenzo, el español Héctor Barberá. Aoyama logró un crono de 1:35.928 por 1:36.025 de Barberá, 1:36.504 de Lorenzo y 1.36.724 del italiano Marco Simoncelli (Gilera).
El tiempo de Lorenzo cobra más importancia ya que tuvo que cambiar la moto tras haber dado las primeras vueltas al circuito Ricardo Tormo de Cheste por problemas eléctricos.
Por su parte, Dovizioso consiguió un registro de 1:36.902 para superar al hermano mayor de Hiroshi Aoyama, Shuhei (Honda), sexto con 1:37.002. Otra mala noticia para el italiano de Honda fue el accidente que sufrió su compañero de equipo, el japonés Yuki Takahashi, que tuvo una caída en la primera sesión de entrenamientos libres y se fracturó la tibia y el peroné de su pierna derecha.
Así, mientras que Dovizioso se ha quedado sin compañero de equipo, Lorenzo tiene al suyo muy bien situado. Aunque las relaciones entre los dos españoles no son precisamente modélicas, Barberá ya ha declarado que ayudará al líder del mundial durante la carrera y ya sabe lo que es ganar en éste circuito.
ROSSI BUSCA ALIADOS El italiano Valentino Rossi (Yamaha) encontró ayer un aliado de lujo en su compatriota Loris Capirossi (Ducati) para derrotar a las Honda el próximo domingo en el Gran Premio de la Comunidad Valenciana y proclamarse campeón del mundo de MotoGP.
Capirossi hizo el mejor crono en la segunda sesión de entrenamientos y cuando el piloto de Ducati logra situarse en el primer lugar de la parrilla, esa es una señal inequívoca de que ganará la carrera. El tiempo de la Ducati beneficia a Rossi, convencido de que su compatriota y amigo prefiere verle a él como campeón del mundo que al estadounidense Nicky Hayden.
