David Barrufet, portero del Barcelona Borges, confirmó ayer que se retira a final de la presente temporada para iniciar una nueva etapa en los despachos, ya que pasará a formar parte del departamento jurídico del club.

"Quería retirarme cuando aún estuviera en forma, bien de cabeza, cuando aún pudiera aportar cosas al equipo. Y la verdad, siempre he dicho que no me veo jugando con 40 años", declaró. Precisamente, Barrufet cumplirá cuatro décadas de vida el próximo 4 de junio. Para entonces habrá completado 22 temporadas --y otras cuatro en categorías inferiores-- defendiendo la camiseta azulgrana.

El jugador barcelonés, uno de los mejores metas de la historia, cree que ha llegado el momento de decir adiós. "Después de 27 años aquí, me tenéis muy visto y no quiero hacerme pesado", ironizó. Convocó a los medios en la sala de prensa del Camp Nou para anunciar lo que era un secreto a voces: que deja el balonmano profesional. Sin embargo, el auditorio no se llenó solo de periodistas, sino de familiares, amigos y compañeros, del mundo de dentro y fuera del balonmano, que querían estar junto al gran capitán en un acto tan emotivo.

RECONOCIMIENTO Allí estaba su mujer, Mari Carmen, su actual entrenador, Xavi Pascual, y todos los miembros de la primera plantilla del Barcelona Borges. Extécnicos suyos, como Valero Rivera o Xesco Espar, y compañeros del mítico Dream Team , como Andrei Chepkin, Xavi O´Callaghan o Enric Masip, estos últimos integrados en el organigrama técnico de la sección.

También hubo representantes del baloncesto azulgrana (Joan Creus, Roger Grimau y José Antonio Montero) y de hockey patines (Ferran Pujalte y Quim Pauls). Todos coincidido con David fuera y dentro el Palau en numerosas ocasiones y con algunos les une una buen amistad.