Cuando se conoció el calendario de Tercera División el pasado verano, el 29 de septiembre quedó marcado en rojo: Villanovense y Cacereño, los dos grandes favoritos para lograr el título, se enfrentaría cara a cara. Pocos podían imaginar que cuando llegase el día, los ambos contendientes lo alcanzarían en tan distintas circunstancias.

El contraste no puede ser más evidente. Los locales han ganado todos los puntos en juego, 15, y pase lo que pase hoy, a partir de las 18.00 horas, terminarán la jornada como líderes. Y enfrente, el Cacereño ha pinchado en cuatro de los cinco encuentros y si pierde esta tarde quedará a 13 puntos de su oponente directo. Un océano para intentar la remontada: una derrota casi podría significar despedirse ya del primer puesto, y eso que solo es la sexta jornada.

El Villanovense llega con la idea de que la relajación y el exceso de confianza son su principal enemigo. Los serones creen que el encuentro es importante, pero no definitivo, independientemente de cual sea el resultado.

El técnico local, Pepe Masegosa, considera que lo que ha hecho el Cacereño hasta ahora no tendrá nada que ver con lo que pase en el Municipal. Cree que los de Julio Cobos, que regresa a un estadio donde ha trabajado en dos etapas bien distintas, se lo pondrán difícil. «Espero que jueguen con intensidad. Creo que ellos van a intentar arreglar el principio de liga aquí, y a partir de ahí somos dos equipos muy parecidos, en lo táctico, en la intensidad, en los objetivos», señala Masegosa.

Piensa que entender este partido «como una final» es un error, a pesar del componente emocional que pueda haber, porque al final son tres puntos. «Hay que jugarlo con las piernas llenas de gasolina, el corazón caliente y la cabeza fría», avisa entrenador andaluz, que, asegura, seguirá viendo al Cacereño como un rival directo que reconducirá su situación, aunque espera que no sea en Villanueva de la Serena. «Creo que tiene una buena plantilla. Cobos es un gran entrenador y al final va a estar arriba». No podrá contar con Mario, Clausí y Matheus. Además, Pajuelo es duda.

En el Cacereño intentan huir del dramatismo, pero resulta inevitable con lo que está pasando. Neto se perfila como sustituto de Chechu en el lateral derecho.