La directiva del Mérida ha vuelto a hacer públicas las quejas sobre las "lamentables" condiciones en las que se encuentra el estadio Romano de la capital extremeña, propiedad del ayuntamiento. El conjunto emeritense insiste en señalar como culpable de esta situación al equipo de gobierno del consistorio, ya que "dichas instalaciones pertenecen única y exclusivamente al Ayuntamiento de Mérida, que es quien decide unilateralmente los equipos de la ciudad que las utilizan, así como su mantenimiento y gestión", en una indisimulada crítica al hecho de tener que compartir el campo con el Imperio. El comunicado termina tachando al concejal de deportes de "incapaz" e "ineficaz".
