La luna de miel que han vivido los directivos de los Wizards de Washington con Michael Jordan podría haber llegado a su final cuando la próxima semana se reúnan ambas partes para valorar su futuro dentro de la organización, de acuerdo a un informe que publicaba ayer el diario The New York Times .

El deterioro en las relaciones de Jordan con el resto de los jugadores, a los que acusó y criticó continuamente durante toda la temporada y especialmente al final cuando no pudieron clasificarse para las series por el título, lo han dejado con muy poca autoridad para tratar de reconstruir el equipo. De acuerdo a la fuente periodística, los dueños del equipo también están preocupados por la ética y capacidad de Jordan como ejecutivo, reflejado en la poca definición que tiene sobre la dirección en la que quiere construir el futuro.