Han tenido que pasar dos partidos, 80 minutos, para que el Nissan Al-Qázeres Extremadura pueda jugar al fin ante su público. Será esta mañana (12.00 horas, pabellón Serrano Macayo) ante el Lointek Gernika, uno de los equipos que están llamados a estar en su misma zona de la clasificación.

Eso es al menos en teoría, ya que el conjunto de Jesús Sánchez se puso como objetivo inequívoco volver a la Copa de la Reina y jugar por primera vez los playoffs. Para eso hay que estar entre los ocho primeros al final de la primera vuelta y de la liga regular, respectivamente, y es una meta idéntica a la que se maneja desde el club vasco.

Por ahora, el nuevo proyecto verde y amarillo va por donde se esperaba: victoria ante un equipo que ha tenido bajas importantes como el Baxi Ferrol y derrota ante el inasequible Perfumerías Avenida, campeón de todo. El 79-52 encajado en Salamanca el miércoles, por mucho que pueda parecer contundente, no ha afectado en absoluto, consciente el Al-Qázeres de que esa era una batalla perdida de antemano y que lo importante era luchar al máximo e ir consolidando su propio estilo. Este parece que será correr y agotar poco las posesiones, con las manos del dúo Gaby Ocete-Pao Ferrari meciendo la cuna.

El Gernika será una buena prueba para saber si este equipo puede llegar lejos o no. Después llegará otra cita complicada al máximo como la visita al Girona, gran antagonista del Perfumerías Avenida. Caer esta mañana sería un salvoconducto para estar 1-3 en la cuarta jornada, aunque luego el calendario se suaviza.

SEÑAS DE IDENTIDAD / En su tercer partido oficial como primer entrenador de un equipo profesional, a Sánchez se le sigue apreciando una tranquilidad pasmosa que ha sido uno de sus avales para conseguir el puesto.

«Tenemos muchas ganas de jugar en el Macayo», dice. Y es que su equipo solo ha jugado ‘en casa’ en un descafeinado amistoso ante el Benfica. Le falta ir intimando con su público. «Esperamos que la gente tenga tantas ganas como nosotros», agrega.

En su opinión, el Gernika «está dando muy buenas sensaciones, primero con una victoria muy clara ante Sant Adriá (42-77) y después levantando un partido muy duro frente a Valencia (69-66 tras dos prórrogas), de los que luego te hacen estar arriba».

Sánchez se muestra también contento con cómo está trabajando su equipo y en qué momento llega. «Hemos dado los pasos en buena dirección. Quizás el miércoles a todos nos hubiera gustado un marcador menos abultado, pero las sensaciones sobre todo en la primera parte fueron buenas. Lo que pasa es que con Avenida si te desconectas casi un cuarto como hicimos, pues te llevas el resultado. Pero queda más la parte positiva. Hay que desconectar de eso y pensar en Gernika porque de ganar este partido sería importantísimo», declara.

Para el técnico, el rival tiene «un equipo muy hecho, muy conjuntado para estas alturas, con jugadoras que están dando muy buen nivel. Espero un partido muy igualado y que se decida en el último cuarto».

La duda es Silvia Romero. Un golpe en el hombro la ha impedido participar en las dos primeras jornadas y estos días se ha estado trabajando con ella para que al menos pueda saltar a la cancha algunos minutos de rotación.

La cita también tendrá un cariz solidario. El Al-Qázeres estrenará una equipación rosa parte de cuya venta se destinará a la lucha contra el cáncer de mama.