Alguna de las estadísticas que acumula el Cacereño después de 17 jornadas en el grupo I de Segunda B son como para luchar por el ascenso a la categoría de plata. Y no es solo su espectacular rendimiento en el último mes y medio, cuando ha conseguido 14 de los 18 puntos en juego, sino también su eficacia defensiva.

En 17 partidos el equipo verde solo ha recibido 15 goles. 14 de ellos los ha encajado René y uno Arturo, que disputó los últimos minutos del partido ante el Celta B. Este número de tantos recibidos del Cacereño es igual al de los equipos que ocupan las plazas de play off de ascenso: Celta B, Lugo, Leganés (a quien han marcado uno más, 16) y Rayo B. El conjunto menos goleado del grupo es el Guadalajara (14), que es octavo.

Los 14 goles en 17 partidos que ha recibido René le sitúan cerca del podio del zamora (es cuarto), con poco más de 0,8 tantos por partido, los mismos números que tiene Iker Casillas, todo un campeón del mundo que acaba de recibir el Guante de Oro por su actuación en Suráfrica.

El protagonista, René, confiesa que prefiere mantenerse al margen de esas cábalas, "más propias de los periodistas". "No me gusta hablar de estos temas, porque cuando lo hago, me meten los goles en el siguiente partido", confiesa en tono de humor. Pero tampoco oculta que es "motivo de orgullo: si los delanteros viven de meter goles, nosotros, los porteros, lo hacemos de evitarlos", señala.

"Pero esta eficacia no es mérito mío, sino de la defensa, que está aportándonos a todos gran seguridad", recalca René, que destaca además la perfecta conjunción de veteranía --"Rives, Tomas"-- y juventud --"Gonzalo, Dani Gómez"-- de los integrantes de la zaga y enumera a todos, sin olvidar a nadie, para recordar que "da igual quien juegue, porque todos lo están haciendo bien".

La metamorfosis verde

René, titular indiscutible, explica que cada lunes empieza a entrenar de cero, "porque creo que cada semana tengo que ganarme el puesto". Es su estrategia para evitar la relajación.

Cuenta que el pasado domingo, tras empatar con el Conquense (1-1), llegaron al vestuario con la sensación de haber perdido. Es una prueba de la metamorfosis que ha sufrido el Cacereño desde la llegada de Montes al banquillo. "Estamos en una dinámica muy buena, aunque ya sabíamos que algún partido tendremos que empatar". ¿Será perder? "No, no, empatar", aclara entre risas.

¿Y qué ha cambiado desde la llegada de Montes? "Todo y nada", dice René, puesto que los jugadores siguen siendo los mismos. "Lo importante es la mentalidad; antes teníamos miedo a perder, ahora solo pensamos en ganar". La próxima parada del expreso verde será el domingo en el Cerro del Espino (12.00 horas), donde le esperán los cachorros del Atlético de Madrid.