El Cáceres Patrimonio de la Humanidad continúa con su punzante calendario de inicio de competición esta tarde en la pista del Menorca Basquet (18.30 horas). Tras la derrota del miércoles ante el Ford Burgos (68-77), llega otro de los favoritos para subir, un equipo que tampoco ha empezado tan bien como pensaba.

De hecho, extremeños y baleares están con el mismo número de victorias, dos, tras cinco encuentros ligueros. El balance podría tener una disculpa para los primeros, intentando ajustar una plantilla con restricciones presupuestarias, pero no tanto en el caso de los segundos, cuyo único objetivo debe ser regresar a una categoría como la ACB que dejaron la pasada campaña y en la que se han hecho habituales desde el 2004.

Si a Gustavo Aranzana le gusta que en los momentos difíciles haya la menor presión posible, este es su día. El entrenador del Cáceres es consciente de que enfrente estará un equipo mucho más exigido y puede que nervioso. La intención es que pasen cuanto antes los dos compromisos que vienen, el de hoy y el del próximo viernes ante otro coco como el Canarias, y empezar a escalar posiciones con lo que viene después. En las siete primeras jornadas los cacereños se habrán enfrentado a casi todos los grandes de la LEB Oro.

NOMBRES PROPIOS El resultado negativo ante el Ford Burgos está asumido. En el vestuario se ha hecho la lectura positiva de lo sucedido: con su máximo anotador, José Angel Antelo, lejos de su mejor forma, el equipo compitió casi hasta el final y hubiera estado mucho más cerca de mejorar sus porcentajes desde el tiro libre y debajo del aro. Aprovechar los nervios del oponente será una de las principales bazas de Aranzana, que ha hecho hincapié en el hecho de que, si se consigue una ventaja de 8-12 puntos, como sucedió en los dos primeros viajes a Girona y Granada, se actúe con calma y no se pierda bajo ningún concepto.

Muchos miran al tobillo de Antelo estos días. Ha mejorado, pero parece difícil imaginar que el jugador pueda recuperar tan rápido el nivel decisivo que mostró en el arranque liguero. Sus compañeros tendrán que dar un paso adelante frente a un cuarteto de pívots de relumbrón: tres nacionales con mucho prestigio en la categoría como Roberto Morentín, Urko Otegui y Oliver Arteaga y un norteamericano puntero como Taylor Coppenrath. El resto de la plantilla menorquina no se queda atrás: generadores de juego como Jorge Jiménez, killers como Marc Blanch y David Navarro y jugadores físicos y de experiencia para la posición de '3' como Andreu Matalí y César Bravo. Problemas con la FIBA por una deuda anterior le han impedido de momento inscribir a otro extranjero, lo que sería sin duda la guinda para Josep Maria Berrocal, campeón en Ucrania la pasada campaña con el Budivelnik.

Precisamente Carleton Scott, el alero alto titular en el Cáceres, concitará mucha atención hoy. Se le están acabando las oportunidades para empezar a jugar medianamente bien, aunque el club descarte, al menos en público, que vaya a prescindir de él en un futuro cercano. Pero todos saben que, en el caso de que las derrotas proliferen y se necesite mejorar la calidad de la plantilla, el primer damnificado será él.

En un partido como este hay que hacerlo prácticamente todo perfecto para ganar: que Carlos Cherry y Dani Rodríguez se complemente bien en la posición de base, que todos los aleros aporten amenaza desde el exterior, que Williams domine bajo tableros y que los reservas den minutos de calidad. Si no, será imposible no ponerse 2-4 en la clasificación.