El balonmano español recordará 2004 por sufrir uno de los episodios más crueles y amargos de los últimos años, en el desenlace del partido olímpico de cuartos de final en Atenas, en el que tras dos prórrogas Alemania derrotó a la selección nacional en la tanda de penaltis.

El camino hacia las semifinales se cortó por el acierto desde los siete metros de Daniel Stephan, después de un partido memorable y espectacular que España tuvo en la mano.

Quedaron para la historia dos pinceladas de distinto color: el majestuoso recital del meta David Barrufet, al final infructuoso, y la amarga despedida con la camiseta nacional del central nacido en Kirguizistán Talant Dujshebaev, cuya nacionalización en 1995 contribuyó de manera decisiva al salto cualitativo español en las competiciones de selecciones nacionales.

Pero meses antes de ese triste adiós de Dujshebaev en Atenas, otro jugador insustituible, el catalán Enric Masip, había comunicado su retirada, entre lágrimas, el 5 de abril. Actuó en más de doscientas ocasiones con la selección española y ganó 53 títulos, el último de ellos la Copa del Rey con el conjunto barcelonista. Ese título fue también el septuagésimo y último para Valero Rivera, el técnico más laureado del deporte español, quien permaneció 20 años al frente de la entidad barcelonista y que decidió poner el punto y final a una etapa plagada de éxitos.

NUEVO CAMPEON La marcha de Valero tuvo resonancia mundial, dando lugar a una renovación en la sección de balonmano del Barcelona para hacer frente al club Ciudad Real, cuyo equipo se convirtió en el nuevo campeón de la Liga Asobal y uno de los más poderosos del mundo. El club manchego, que ha ido tejiendo una de las plantillas más competitivas del continente, levantó el buscado título liguero que podría servir como una primera piedra de un sólido reinado. Su entrenador es el emeritense Juan de Dios Román. El también extremeño Carlos Prieto dispone de pocos minutos.

La palabra renovación también afectó al balonmano femenino, que vivió en el 2004 episodios interesantes. El Alsa Elda Prestigio repitió título de Liga y la selección logró un inédito quinto puesto en Atenas y una meritoria octava plaza en el reciente Europeo.