La presencia del entrenador de moda en el baloncesto español, Porfirio Fisac, es el último de los múltiples alicientes del Día del Minibasket, que tendrá lugar mañana en Trujillo. El entrenador del Bruesa GBC, que logró el ascenso a la Liga ACB el pasado martes, mantiene unas excelentes relaciones con la Federación Extremeña, lo que ha hecho que acepte su invitación inmediatamente.

Ayer mismo, y tras dedicar el éxito a sus amigos extremeños, Fisac fue confirmado en su puesto por el presidente del club donostiarra, Miguel Santos. "Esta es su casa", indicó en la recepción oficial.

No obstante, el técnico no puede rivalizar con el villanovense José Manuel Calderón como gran estrella del acontecimiento de mañana. Como ya se conocía, el base de Toronto Raptors estará con los aproximadamente mil niños que se concitarán para jugar al baloncesto en la playa Mayor, a la sombra de la estatua de Francisco Pizarro. En los días que lleva en Extremadura el jugador se ha prestado para todo tipo de iniciativas desinteresadamente y haciendo gala de una enorme cercanía.

Los datos facilitados por la federación no dejan lugar a la duda sobre un día esperado por todos con entusiasmo y que cumple su décima edición recordando de nuevo al desaparecido Quini Pulido. 35 clubs, 76 partidos, 76 partidos, 20 autobuses, 100 monitores, 70 personas de organización, 12 pistas...

Para el recuerdo

Los números no sirven para explicarlo todo. En las anteriores ediciones lo más importante fue siempre lo intangible: la convivencia mezclada con competitividad, el placer de meter canastas y evitar que las haga el rival. Paralelamente habrá actividades (talleres, cuentacuentos , deportes alternativos) que servirán para enriquecer la jornada. La organización servirá una comida a los participantes y estará siempre pendiente de que tengan agua: el calor puede ser uno de los enemigos de la fiesta. Habrá además múltiples regalos y una gorra y una camiseta para cada jugador.