Seis puntos cada uno. Dos clubs que tradicionalmente han mantenido muy buenas relaciones. Ambos son clásicos del fútbol extremeño. A las 12.00 (Canal Extremadura Televisión) saldrán al campo Cacereño y Villanovense, dos equipos de tradición en la comunidad cuyo objetivo para este año, a tenor de las manifestaciones de unos y otros, también es común: no pasar apuros y salvar la categoría.

El Cacereño, que no ha podido sumar en sus dos últimos enfrentamientos en casa ante el Villanovense, respeta a su rival, aunque su entrenador, Pedro Pablo Braojos, haya insistido en que lo importante es cómo lo haga su equipo sobre el césped. También su colega Adolfo Muñoz ha alabado la condición de los cacereños, una formación de la que ha subrayado su capacidad para ser ordenado.

En el Cacereño no hay bajas más allá de las de dos canteranos, Alfonso y Torres, y Braojos dispondrá de su once tipo, que sufre ligeras variaciones en cada choque. Sí es seguro que volverán los dos puntas, Alex y Mena, que tan buena sociedad formaran hace dos semanas ante el Sevilla Atlético, aunque no se sumaran los tres puntos.

Ya no habrá problemas de bajas en defensa. Jaraíz, cinco temporadas en el Villanovense, puede recuperar su puesto en la derecha, aunque también podría ser uno más en el centro del campo. Palero y Dieguito se pueden disputar el lateral izquierdo, con permiso de Samuel, también restablecido y que era, en principio, el jugador específico para ese costado en la línea de atrás. ¿Volverá Mario Carrizosa? El buen trabajo de Gonzalo desde que le sustituyó parece indicar que no.

Israel y Santi Villa ocuparán las bandas, con Santi Amaro y su escudero, Lolo, completando el cuarteto. "Lo estamos haciendo bien; no soy muy amigo de revoluciones", ha advertido Braojos, pese a que durante varias jornadas haya sorprendido con cambios no anunciados.

CON MORAL Mientras, el Villanovense afronta su segundo derbi de la temporada con la intención de conseguir un buen resultado que le haga abandonar la dinámica perdedora de las dos últimas jornadas con las derrotas en Sevilla ante el Betis B (3-1) y ante el Linense (1-4) en el último partido en el Romero Cuerda. Históricamente el Príncipe Felipe ha sido un campo talismán para los serones. Precisamente la última visita del Villanovense al Príncipe Felipe fue en la temporada 2009-2010 con victoria de los visitantes (1-2) que acarreó la destitución del entonces técnico cacereño Alcázar.

El técnico serón tendrá las bajas de Javi Sánchez, que sigue recuperándose de un microrrotura fibrilar y con la de Borja Gil, fue expulsado ante el Linense. En el capítulo de altas, Muñoz podrá contar con Lolo Guerrero después de cumplir un partido de sanción tras su expulsión ante el Betis B. El central andaluz podrá reencontrarse de nuevo con un Cacereño en el que militó en la temporada 2008-2009.

Tras el partido de sanción Lolo Guerrero volverá al centro de la zaga formando pareja de centrales con Cabrera y con Trinidad y Tomillo en los laterales. La faceta organizativa recaerá de nuevo en el trivote Nico Chietino, Raúl Barcos y Sergio Narváez que tan buenas sensaciones han dejado. Las dudas se centran en la punta de lanza donde Muñoz sopesa apostar por la experiencia de Paulino o por la rapidez y verticalidad de Willy.