Rudy Fernández también forma parte ya de la historia de la NBA. El escolta mallorquín, fiel a su carácter competitivo y ganador, no quiso concluir la fase regular sin cumplir su objetivo. El jugador de los Blazers necesitaba seis aciertos para superar la marca de Kerry Kittles y lograr el récord de triples de un novato. La empresa no era fácil, pero Rudy no falló en el triunfo ante los Nuggets (104-76). Consiguió exactamente lo que necesitaba y estableció el nuevo registro de triples de un rookie: 159, uno más que el antiguo escolta de los Nets, que anotó 158 triples en la temporada 1996-97.
Faltaban seis minutos para el final del partido cuando Rudy recibió un pase de su socio más apreciado en Portland, el base canario Sergio Rodríguez. Miró a canasta con convicción y clavó su sexto triple de la noche. "El récord era muy importante. Todo el mundo en España hablaba sobre él. Pienso que es bueno que un chico español bata esta marca. Además, es positivo para el equipo y fantástico para mí", comentó el exjugador del DKV Joventut.
