El circuito de Albacete será el escenario de la última batalla del FIM CEV Repsol antes del parón estival. Santi Barragán, dispuesto a sacarse la espina de Montmeló, llega con las pilas cargadas y con el objetivo de acortar la diferencia de puntos que le separan en la clasificación general. Ahora es tercero con una diferencia de 29 puntos respecto del primero.

Para esta carrera el extremeño contará con una nueva montura BMW tras el incendio que sufrió la anterior en Barcelona, con rotura de motor. Se trata de un nuevo punto de partida para Barragán, que no deja de confiar en que con todo en orden se puede pelear por victorias. "Lo ocurrido en Barcelona nos ha alejado mucho del liderato pero no podemos bajar el ritmo", dice.