SEVILLA - 3: Javi Varas; Dabo, Sergio Sánchez, Cáceres, Alexis (Konko, min. 59), Fernando Navarro; Zokora, Romaric (Jesús Navas, min. 76), Renato; Kanouté (Perotti, min. 72), Negredo.

VILLARREAL - 0: Diego López; Cicinho, Gonzalo, Catalá (Bruno, min. 62), Oriol; Musacchio, Borja Valero; Cani (Capdevila, min. 74), Montero; Rossi, Altidore (Rubén, min. 62).

GOLES: 1-0: min. 7, Renato. 2-0: min. 47, Kanouté. 3-0: min. 49, Alexis.

ARBITRO: Pérez Lasa (C. Vasco). Amonestó a Navarro, Rossi y Musacchio.

El Sevilla se convirtió ayer en el primer semifinalista de la Copa al vapulear al Villarreal en el Sánchez Pizjuán (3-0). El vigente campeón se olvidó de sus penurias en la Liga y completó un brillante encuentro ante un rival mermado por las bajas de hombres tan importantes como Nilmar, Cazorla y Marcos Senna. Sergio Sánchez, que fue titular, jugó su primer partido desde el 19 de diciembre del pasado año después de superar una dolencia cardiaca que estuvo a punto de apartarle del fútbol. La felicidad fue completa en Sevilla.

Con toda su familia en las gradas, el futbolista hizo un gran encuentro en su regreso. Manzano le ubicó en el lateral derecho en una defensa de cinco que ayudó a subsanar la fragilidad que había marcado a la zaga en los últimos encuentros. El técnico cambió por completo de sistema, con dos carrileros ofensivos y tres centrales.

Después del 3-3 de El Madrigal, el Sevilla lo tenía bastante bien para acceder a las semifinales, pero los nervios del equipo en casa preocupaban a Manzano, que consiguió una mayor estabilidad con su nuevo sistema, pese a dejar en el banquillo a estrellas como Navas, Luis Fabiano, Capel y Perotti.

Pronto se avanzó el Sevilla con un tanto de Renato tras una jugada de Negredo (m. 6). Y nada más volver de los vestuarios Kanouté (m. 47) y Alexis (m. 49) sentenciaron.