VIDROGAL ALUMISAN: Touza (26), Liñeira (11), Albor (8), Díaz (1) y Camara (10) --equipo inicial-- Pesante (-), Román (6), Gil (-), Piñeiro (-) y Suárez (-).
FEMENINO CACERES 2016: Toñi Hernández (13), Ayste Slenyte (6), Alejandra Manzano (6), Paola Prieto (8) y Nereida Ramírez (21) --equipo inicial-- Jara Salgado (-).
MARCADOR POR CUARTOS: 17-13, 28-27 (descanso), 42-37 y 62-54 (final).
ARBITROS: Guillán (Galicia) y Pombo (Asturias). Eliminaron por cinco faltas personales a Touza (m.37) y Camara (m.38) por el Vidrogal Alumisan.
El Cáceres 2016 se descuelga de las primeras posiciones de la tabla, que llegó a liderar, tras sumar su tercera derrota consecutiva (62-54) en su visita a la pista del Vidrogal Alumisan, en un choque en el que las extremeñas pagaron su escasa efectividad.
La maldición que parece perseguir al conjunto cacereño desde que se aupara a la primera posición de la clasificación en la cuarta jornada liguera, vivió un nuevo episodio en Santiago de Compostela, donde las de Jacinto Carbajal nunca estuvieron en disposición de ganar.
La actuación de la pareja formada por Toñi Hernández y Nereida Ramírez no se vio en ningún momento respaldada por el resto de las integrantes del cuadro extremeños, que apenas aportaron nada en ataque.
Los tan sólo seis puntos de la lituana Ayste Slenyte, los mismos que anotó la alero Alejandro Manzano, dejaron en evidencia la endeblez ofensiva de las cacereñas, que únicamente con la aportación de Hernández y Ramírez, siempre fue a remolque del correoso conjunto local.
