Alrededor de diez mil explotaciones crían porcino ibérico actualmente en Extremadura, la comunidad autónoma con mayor capacidad de producción de ibérico al contar sus dehesas con cerca de 150.000 madres, lo que permite criar unos dos millones de animales cada año en la región. El sector porcino representa un seis por ciento de la producción final agraria de Extremadura, porcentaje que, según las previsiones de la Junta, puede incrementarse notablemente, porque los cerdos que se sacrifican dentro de la región aún no superan el 35%.

Así lo indicó ayer el director general de Explotaciones Agrarias, Juan Carlos Antequera, durante la presentación del Cuaderno de Explotación del Porcino que, elaborado por su departamento en consenso con el sector, recoge todas las explotaciones extremeñas acogidas a la norma de calidad del cerdo ibérico.

Antequera explicó que la edición del cuaderno constituye la última de las acciones emprendidas por la Junta para clarificar el sector, de acuerdo con la norma de calidad, y que responde a una reivindicación histórica de los productores de ibéricos.

El cuaderno describe la trazabilidad -seguimiento del producto en todo el proceso- que debe llevar a cabo el ganadero, en función de un sistema de identificación fiable y seguro de los reproductores y de sus producciones, que garanticen la calidad racial.

Además explica la formación de lotes en las explotaciones de producción y de cebo, y contempla el factor de calidad alimenticia, con especial mención a las fases de bellota y recebo, aspectos que deben verificar las entidades privadas de inspección.