El gobernador del Banco de España, Miguel Angel Fernández Ordóñez, abogó ayer por adoptar reformas estructurales y por hacerlo ya, cuanto antes. Según dijo, "cuanto más se demore la adopción de las necesarias políticas nacionales, mayores serán los costes potenciales ante acontecimientos adversos". Para el gobernador, "justamente la crisis debe aprovecharse para emprender todas estas reformas estructurales".

En su intervención, en unas jornadas conmemorativas del décimo aniversario del ingreso de España en la Unión Monetaria, el gobernador no se detuvo en pormenorizar el contenido de las reformas, a su juicio, necesarias. Eso es algo que el gobernador sí ha hecho en los diez últimos días, en los que, por ejemplo, ha apuntado la necesidad de reformar el sistema de protección a los desempleados y de favorecer el alquiler de viviendas, así como de introducir más competencia en los servicios, el transporte ferroviario, la energía, la administración pública, etc.

Fernández Ordóñez valoró como un éxito los 10 años del euro. Destacó los esfuerzos de los países por disciplinar sus cuentas; "pero en la próxima década, además de continuar en esta línea, los esfuerzos deben concentrarse en adoptar políticas estructurales", dijo.

El mismo mensaje fue remachado por el comisario europeo de Asuntos Económicos, Joaquín Almunia, quien señaló la necesidad de reformas en las políticas energética y medioambiental y en educación, y de una mayor inversión en investigación y desarrollo (I+D). Según el comisario, se espera que la caída de la actividad económica finalice en la segunda mitad del 2009 y "ver los inicios de una recuperación gradual al inicio del 2010".