El Ministerio de Sanidad y Consumo denunciará a operadoras de telefonía, bancos y otras empresas que efectúen llamadas a los hogares para anunciar ofertas y servicios que no hayan sido solicitados por el cliente, excepto en el caso de reclamar un cobro. El organismo prevé actuar contra ellas por vía judicial porque pretende introducir en la legislación española una directiva europea que tipifica la legalidad de este tipo de comunicación que, a diferencia del correo electrónico y postal, no estaba regulado hasta el momento.

El ministro Bernat Soria aseguró ayer que a partir de este cambio, particulares y asociaciones de consumidores podrán demandar a estas compañías, que suelen llamar por las tardes y en horas de descanso familiar, y cuya insistencia ha aumentado, dijo, "de forma abusiva en las últimas semanas".

INDEFENSION El ministro Soria explicó que su departamento ya ha enviado una circular a las operadoras de telefonía alertándoles de la ilegalidad de esta práctica, ante la que el usuario se ve indefenso porque suele venir en la mayoría de ocasiones de números que no se identifican o figuran como privados.

Sanidad y Consumo se compromete, además, a colaborar con las asociaciones profesionales para elaborar códigos de conducta que ayuden a controlar las prácticas publicitarias irregulares.