EL INCREMENTO de los días festivos en los que se permite la apertura de comercios supondría un incremento de los costes de hasta el 15% que se trasladaría a los consumidores, según la memoria de la ley de horarios comerciales que prepara el Gobierno. Con esta medida, el coste de personal en el comercio minorista creció en 1,17 puntos, al pasar del 17,18% de las ventas en 1998 al 18,37% en el 2002.